La Roja cayó por 2 a 0 ante un Irán pragmático e inteligente, que apostando a la contra, evidenció las falencias del seleccionado nacional.
Por: Pablo Yutronic
Frente a todos los pronósticos, el cuadro de Jorge Sampaoli no dió la talla en el Estadio NV Arena de Viena, y cayó con justicia por 2 a 0 ante un Irán que apostando a la contra supo doblegar a un errático y pálido Chile.
La Roja saltó a la cancha con Bravo, Pulgar, Fuenzalida, Cornejo, Jara, Roco, Fernández, Millar, Vargas, Orellana y González.
Claramente el casildense quería ver algunas opciones de recambio de cara a lo que será el gran desafío de la Copa América que se aproxima a pasos agigantados. Opciones que no rindieron, realizando un pobre primer tiempo, y que fueron testigo del primer tanto iraní al minuto 20 tras una falla de Millar en un córner, soltando la marca y que aprovechó Javad Nekounam para abrir el marcador.
El segundo tiempo saltó Sánchez, Pizarro, Medel, Gutiérrez e Isla al terreno de juego, y de ahí en adelante, Chile comenzó a acercarse con mayor profundidad y peligro al arco iraní, pero sin mayor precisión. Sin embargo, el segundo gol iraní llegaría al minuto 49 bajo los pies de Vahid Amiri, en una nueva contra del equipo blanco que dejaba sin opciones a un cedido Claudio Bravo.
La posesión de balón que caracteriza a la selección no dio sus frutos y terminó por sufrir una dolorosa derrota ante un cuadro inferior que evidenció las dudas de un seleccionado que parece no tener variantes de cara al torneo continental.
Rápidamente la Roja debe dar vuelta la página y pensar de lleno en lo que será el gran desafío de este fecha FIFA, cuando se enfrente el próximo domingo a partir del mediodía en el Emirates Stadium de Londres, a la selección de Brasil.