Gracias a un gol de Ruidiaz que no debió cobrarse, los de Gareca vencieron 1-0 y se metieron en cuartos.
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Brasil quedó eliminado de la Copa América en medio de un verdadero escándalo. Al equipo de Dunga le alcanzaba con el empate para avanzar a la siguiente ronda y lo conseguía ante Perú, pero un gol ilícito de Raúl Ruidíaz terminó arruinándole la fiesta y generando la polémica: el árbitro uruguayo Andrés Cunha se tomó seis minutos para convalidarlo.
¿Qué pasó? El delantero peruano recibió un centro en el área y empujó la pelota con la mano, desatando la euforia del conjunto incaico. Pero la claridad de la falta también propició las airadas protestas de los jugadores brasileños, por lo que el juez dio marcha atrás su decisión y se tomó un tiempo considerable para escuchar indicaciones a través de su intercomunicador. Y cuando todo parecía indicar que iba a anular el tanto, decidió convalidarlo, para sorpresa de propios y extraños.
Antes, el conjunto carioca fue superior durante gran parte del primer tiempo, sin mostrar claridad en los últimos metros para poder plasmarlo en el marcador. Lors dirigidos por Ricardo Gareca sólo pudieron sorprender en alguna jugada aislada, pero terminaron generando un claro penal a favor, no cobrado por el polémico árbitro.
Perú se adelantó y consiguió tener el dominio de la pelota durante buena parte del segundo tiempo, pero también sufrió la falta de ideas en ataque. Brasil intentó lastimar de contra, sin suerte delante del arco. Luego, llegó la insólita jugada que terminó en la eliminación histórica del equipo de Dunga, la clasificación del conjunto de Gareca y una jugada de la que se hablará por mucho tiempo...
