En el clásico de la fecha de la Premier League
Un gol en el tiempo añadido del holandés Robin Van Persie evitó la derrota del Manchester United en Old Trafford ante el Chelsea (1-1), que implantó inicialmente su autoridad gracias al veterano atacante marfileño Didier Drogba, sustituto del hispano brasileño Diego Costa.
Cuatro minutos por encima del minuto 90 dieron vida a los reds en Old Trafford, en cuyo palco se acomodó el portero Víctor Valdés, que en los próximos días empezará a entrenar a las órdenes de Louis Van Gaal para recobrar el estado de forma tras su lesión.
El gol de Van Persie evitó la derrota del conjunto de Jose Mourinho, que se las prometió muy felices desde el minuto 54, cuando un córner lanzado por Cesc Fábregas fue rematado de cabeza por Drogba. Pocas veces falta a la cita con el gol el africano, encargado de paliar la baja de Costa, ausente por enfermedad.
Es la segunda vez en lo que va de Premier que el Chelsea no termina con triunfo su partido. No conocen la derrota los blues, que mandan en la tabla inglesa con siete victorias y dos empates en los nueve choques disputados. En Old Trafford, John Terry jugó su partido 430 con el Chelsea. Superó el récord de Frank Lampard. Toda una leyenda.
Mourinho no pudo contar con Costa. Tampoco con César Azpilicueta, sancionado. Van Gaal, por su parte, tuvo que prescindir del colombiano Radamel Falcao, lesionado.
El punto mantiene la solvencia del equipo londinense en la clasificación que lidera con cuatro puntos de ventaja sobre el Southampton, segundo, y seis sobre el Manchester City, que perdió contra el West Ham el sábado. Al United el empate le sirve de poco. Solo el factor anímico queda rehabilitado con el tanto postrero de Van Persie. En la tabla está a años luz del líder. Con diez puntos de desventaja y anclado en el ecuador de la clasificación.
EFE