El DT de los “albos” explicó que habló la situación con el plantel y prefirió evitar un momento incómodo para ambas partes.
Polémica sigue generando la noticia de que los jugadores de Colo Colo impidieron que Claudio Bravo entrenara en el estadio Monumental en diciembre pasado, durante el receso de la liga española. El meta del Barcelona confirmó la información a través de Twitter y este martes Héctor Tapia encaró la situación, asegurando que la decisión final la tomó él.
La situación se debió a las declaraciones de Bravo sobre el caso de Julio Barroso, en donde el meta afirmó que "me cansa el hecho de que existen tantas quejas o que el futbolista hable de cosas ajenas al fútbol. No soy de quejarme o de ir frente al árbitro. Si me toca ganar celebro y si pierdo lo asumo".
Tras la práctica de hoy, Tapia aseguró sobre el tema que "los jugadores que han querido venir a entrenar siempre me preguntan. Yo consulté al plantel y decidí evitar una situación incómoda. Por el momento que estábamos viviendo no iba a ser cómodo ni para el plantel, ni para Claudio. Por declaraciones que ustedes ya saben".
Asimismo, agregó que "me tocó compartir equipos con él, mi intención no es cerrarle las puertas a nadie. No es fácil tener que manejar ciertas situaciones. Me gustaría mucho más estar hablando de las líneas laterales y los arcos. Si tenemos que tener una conversación con Claudio, yo no tengo problema".
Finalmente, el estratega espera que tanto Gonzalo Fierro como Emialiano Vecchio no sean sancionados este martes, tras presentarse en el Tribunal de Disciplina. El capitán "albo" debe declarar por su simulación ante Deportes Iquique y el volante por sus declaraciones cruzadas con Johnny Herrera.
AGENCIA TRAYECTOS
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