El hecho de quedar marcado como el que perdió la "paternidad" ante Universidad de Chile sería la gota que rebalsaría el vaso en Blanco y Negro.
En Colo-Colo no hay tranquilidad. La derrota frente a Cobresal en el estadio Monumental fue un golpe duro para el Cacique y todos los dardos van en dirección a Mario Salas, quien no ha encontrado respuestas en la segunda rueda del Campeonato Nacional.
El equipo del "Comandante" solamente suma cinco unidades de 18 posibles, perdiendo terreno en su lucha por el título frente a Universidad Católica, que se separó a 13 puntos de los albos.
Aunque el elenco de Macul continúa en el segundo puesto, ingresando directamente a la fase de grupos de la Copa Libertadores, los últimos resultados no tienen contento a los hinchas y a algunos directores de Blanco y Negro, pese a que Aníbal Mosa, presidente de la concesionaria, lo respaldó al final del cotejo.
"Lo veo nublado, somos un desastre. Con Cobresal hizo cambios irrelevantes: estábamos perdiendo el mediocampo y la solución fue sacar a (Gabriel) Suazo y poner un delantero. Todas sus formaciones son distintas, no vemos una consecuencia de su trabajo", afirmó un directivo a El Mercurio.
Sin embargo, todavía no se habla de un posible despido, lo que le costaría cerca de 800 mil dólares a la escuadra de Pedrero. Pero detallan que una derrota frente a Universidad de Chile en el estadio Monumental podría ser la gota que rebalse el vaso.
"Salas quedaría marcado como quien perdió la paternidad de tantos años sobre la U y sería insostenible su continuidad. Y para Mosa la presión sería igualmente fuerte", sostuvieron desde ByN.
Como sea, Mario Salas y Colo-Colo no tendrán descanso en el receso, pues deberán medirse este sábado frente a Everton, a las 17:30 horas, por los cuartos de final de Copa Chile.
PURANOTICIA