Era un partido importante, no solo por la calidad de los planteles, sino que también por la diferencia de seis puntos que tenían los dirigidos de Jürgen Klopp sobre los de Josep Guardiola, quien decidió utilizar al cuestionado otrora capitán de la Roja tras la lesión de Ederson.
Claudio Bravo tuvo un ingrato compromiso en su regreso a la titularidad en la Premier League. El arco del portero chileno fue vulnerado por un Liverpool que supo concretar sus oportunidades para vencer al Manchester City por 3 a 1 y escaparse en la cima de la tabla de posiciones.
Era un partido importante, no solo por la calidad de los planteles, sino que también por la diferencia de seis puntos que tenían los dirigidos de Jürgen Klopp sobre los de Josep Guardiola, quien decidió utilizar al cuestionado otrora capitán de la Roja tras la lesión de Ederson.
Y las cosas no iniciaron de la mejor manera para el formado en Colo Colo. Con su juego directo y de velocidad, los Reds se colocaron en ventaja a los 6' con un latigazo desde fuera del área de Fabinho, haciendo estéril el vuelo del seleccionado chileno. Sin embargo, la polémica se instaló después de que los Citizens se quejaran de una mano de Trent Alexander-Arnold en la jugada anterior.
El cuadro mancuniano intentó responder con la posesión a su favor, pero el segundo vino minutos después. Un centro preciso de Andrew Robertson culminó con un testazo cruzado de Mohamed Salah que dejó sin opciones a Bravo. Trece en el cronómetro y dos goles en Anfield Road para los locales.
La poca solidez defensiva de la visita hizo que el oriundo de Viluco también tuviera que reaccionar. Primero con un zapatazo frontal de Roberto Firmino en el área y posteriormente un tiro lejano de Salah también fue repelido por el cancerbero. En el lado ofensivo, Sergio Agüero naufragaba, mientras que Angeliño se aproximaba por la banda izquierda.
En el complemento, las cosas no cambiaron y rápidamente Sadio Mané amplió las cifras con un certero cabezazo en el segundo poste. Jordan Henderson llegó a línea de fondo y le puso un caramelo al senegalés, quien venció al bicampeón de América, el cual dudó un segundo en salir a cortar.
El final fue casi todo para los Sky Blues. Se quedaron con la posesión y lograron descontar con un ajustado remate de Bernardo Silva. Nacieron esperanzas de remontar, pero no consiguieron hacer más. Gabriel Jesús pudo ponerle emoción con un pase por bajo de que no logró conectar. Además, hubo otra polémica mano de Alexander-Arnold, que desató la furia de Guardiola.
Con este resultado, el Liverpool se distanció de sus perseguidores con 34 unidades, ocho más que su actual escolta, el Leicester City. En tanto, el Manchester City bajó al cuarto puesto con 25 puntos, nueve menos que su rival.
PURANOTICIA