En la familia del tenis nacional ven con buenos ojos que el ex número uno del mundo sea el sucesor de José Hinzpeter. Sin embargo, la ley frena esta posibilidad, pues para ser candidato debe estar cómo mínimo dos años en el directorio de un club o de una asociación.
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Tras la renuncia de José Hinzpeter a la presidencia de la Federación de Tenis de Chile, rápidamente comenzaron a aparecer nombres para reemplazarlos. Uno de ellos fue el de Marcelo Ríos, ex número del mundo, y que generó bastante interés por
"Yo estudié economía y creo que el Chino tiene caraterísticas potentísimas que si se les saca partido, le harían muy bien al tenis. Él es fanático , ha demostrado ser súper profesional y prendido en la Copa Davis. Tiene una tremenda actitud y una tremenda imagen", reconoció el ex tenista nacional Gabriel Silberstein a La Tercera.
"El Chino es una marca y las redes de contacto y conocimiento que tiene podrían usarse muy bien siendo la cabeza del tenis chileno. El Chino bien administrado, es decir con gente que sepa de contabilidad y de gestión de empresas más un buen abogado, lo haría muy bien", añadió.
En tanto, el entrenador Leonardo Zuleta también ve con benos ojos una posible llegada del zurdo a la testera del organismo. "Si el Chino está rodeado de gente que sabe de empresa y de tenis, como Rodrigo Gana o Gabriel Silberstein, el proyecto funcionaría bien y atraería mayores auspicios. No sólo hay preocuparse de tener referentes, sino que de masificar el tenis, algo que hasta ahora Hinzpeter no lo ha hecho", enfatizó.
De todas formas, la posibilidad de que Ríos arribe a la presidencia de la FTCH se ve frenada por los estatutos del organismo, ya que para ser candidato hay que estar cómo mínimo dos años en el directorio de un club o de una asociación.
"El Chino tiene una súper capacidad. Es un tipo muy exitoso en los negocios y estoy seguro de que lo haría muy bien. Sin embargo, están los estatutos que van en concordancia con lo que dice la Ley de Federaciones Deportivas. Además, no sé si Marcelo tenga paciencia", explicó Hinzpeter.
Por su lado, Silberstein aseguró que "los estatutos son lo peor de las federaciones, ya que les restan flexibilidad y no permiten hacer más cambios".
Pn/cp
ATON Chile
