El seleccionado nacional reaccionó con molestia e indignación por el asalto sufrido al noche del sábado junto a su esposa en la comuna de La Florida, asegurando que "los delincuentes ya se tomaron el país".
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Díaz contó que se trató de "un acto de mucha violencia. La sensación que queda es de frustración, porque así como le pasa a muchas personas acá en Chile. Creo que los delincuentes ya se tomaron el país".
"Uno es una persona normal como cualquier ciudadano de Chile y que te pasen este tipo de cosas, es porque de verdad que no estamos privados de nada, así que mucha lata por lo sucedido", añadió.
El jugador del Hamburgo alemán relató que por suerte su suegro mantiene una pistola, pudo pegar dos tiros al aire, ahuyentando a los antisociales. "Tiene un arma por precaución, porque si en Chile uno no se cuida no te va a cuidar nadie. Quizás qué otra cosa hubiera pasado si es que él no sale disparando. Quizás nos hubieran disparado ellos a nosotros".
El ex Basilea y Universidad de Chile agregó que "llegaron con mucha violencia, yo lamentablemente me estaba abrochando el zapato con la puerta abierta del copiloto. Lamentablemente uno no puede hacer nada, llegan con armas de fuego y lo intimidan a uno. Lo único que hicimos fue tratar de arrancar y que obviamente no nos pasara nada (...) quedé choqueado".
Pn/fg
AGENCIA UNO.
