Claudio Bravo pese a estar en el banco de suplentes y no disputar ningún minuto de la competición, se convierte en el primer chileno en levantar la "orejona".
En una entretenida y dramática final, Barcelona se consagró campeón de la UEFA Champions League, tras vencer por 3 a 1 a la Juventus de Turín, ante 76 mil almas que llegaron al mítico Olímpico de Berlín.
Con Arturo Vidal entre los titulares y con Claudio Bravo en el banco de suplentes, la final de Europa tenía asegurada la presencia de algún chileno sobre el terreno de juego y así fue, cumpliendo las expectativas de un partido esperado por todos.
Un primer tiempo donde fue todo para el Barcelona, que encontró el gol tan sólo a los 4 minutos de juego, obra del croata Iván Rakitic tras gran jugada colectiva culé.
El segundo tiempo la Juventus equiparó las acciones tras lograr el empate al minuto 55 con el tanto del español Alvaro Morata. De ahí en más, el cuadro italiano ahogaría a un desconcertado Barcelona, que cuando más necesitó de Messi, estuvo para salvarlo.
El argentino saca un gran remate en la frontal del área, Buffon da rebote y Suárez a merced aprovecha para convertir el segundo al minuto 72.
Finalmente el tercero llegaría en una contra letal del Barca ya cuando el partido finalizaba. Neymar hace una pared con Pedro, y el crack brasilero sentencia y le otorga la quinta Copa de Europa al Barcelona.
De esta forma, Claudio Bravo pese a no jugar ningún solo minuto de esta competición, se convierte en el primer chileno en levantar la mítica "orejona".
Por otro lado, Vidal se convierte en el primer jugador nacional en disputar una final de Champions con presencia en cancha. Buen cometido del oriundo de San Joaquín, pese a comenzar el partido un poco más agresivo de lo normal y viendo amarilla al minuto 11 de juego.
El cuadro de Bravo cierra una temporada magistral, consagrándose en las tres competiciones que disputó, obteniendo la "triple corona". Liga de España, Copa del Rey y Champions League.
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Puranoticia