Javier Álvarez, presidente de la Asociación Gastronómica y Cultural del barrio poniente de Viña del Mar. informó que este jueves se produjo un aumento de 20% en las ventas.
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Luego de más de un año con toque de queda, llegó el primer viernes del año sin la medida restrictiva, algo que muchos estaban esperando. Si bien los restaurantes ya venían cerrando sus puertas a medianoche, muchos debían enfrentar aquel indeseado momento donde debían despachar a sus clientes más temprano de lo que estaban acostumbrados.
En Santiago los barrios gastronómicos están con sus reservas completas y con grandes filas afuera de los locales. En Viña del Mar el panorama ha sido similar. Javier Álvarez, presidente de la Asociación Gastronómica y Cultural del barrio poniente de Viña del Mar, señaló que ha habido un cambio significativo estos días.
“Estamos contentos con que por fin se acabó el toque de queda. Ayer los locales pudimos atender hasta más tarde. Tuvimos más gente, más público, un aumento de 20% en las ventas y teníamos todas la expectativas en el viernes y sábado, y hoy ha cumplido todas las expectativas”, aseguró.
Los aforos están completos en todos lados. “Estamos todos los locales super full, llenos, aunque obviamente respetando todos los protocolos sanitarios y el aforo. Estamos super contentos y hay un ambiente super rico en el barrio y nos ha venido muy bien a nosotros que lo hemos pasado muy mal en este último tiempo”, agregó.
Además, aseguró que ha sido importante para los trabajadores. “También le viene bien a nuestros trabajadores, que pueden aumentar su jornada laboral y ganar más propina, que es parte fundamental del sueldo de nuestros trabajadores. Esperamos que mañana va a estar incluso mejor que hoy y que el fin de semana va a ser redondito”, señaló Álvarez.
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