CCU argumenta que el SII “está creando un tributo nuevo que no tiene respaldo alguno en la ley y contradice la actuación anterior propia del Servicio por muchas décadas en su función”.
CCU y Watts presentaron, por separado, recursos de protección ante la Corte de Apelaciones de Santiago en contra del director de Impuestos Internos, Hernán Frigolett, quien firmó una circular que modifica el Impuesto Agregado a las Bebidas Analcohólicas (IAEA).
Según consignó El Mercurio, con estas acciones se busca dejar sin efecto la extensión del impuesto adicional de bebidas analcohólicas a los néctares e isotónicas.
A través de un escrito ingresado por el abogado Arturo Fermandois, CCU argumenta que el SII “está creando un tributo nuevo que no tiene respaldo alguno en la ley y contradice la actuación anterior propia del Servicio por muchas décadas en su función”.
“Se trata de un acto abiertamente ilegal, el cual es particularmente grave —e incluso gravísimo—, ya que en materia tributaria rige en forma estricta el principio de legalidad (artículo 19 número 20 de la Constitución). Este supone que, a lo menos, el hecho gravado, la base imponible, la tasa, las exenciones y las infracciones del tributo deben estar completamente descritos en la norma legal”, señalan.
CCU sostiene que el director del SII creó un hecho gravado nuevo "que jamás el legislador autorizó a gravar, consistente en la venta o importación de las bebidas isotónicas, hipotónicas y néctares".
Asimismo, se menciona que las bebidas isotónicas y néctares gravadas por el nuevo impuesto están clasificadas en el Reglamento Sanitario de Alimentos emitido por el mismo Ministerio de Salud, en una categoría distinta a las bebidas analcohólicas.
Además, la compañía indica que en 2014 se aprobó la Ley 20.780 para incluir a las bebidas energizantes o hipertónicas dentro de aquellas sujetas al IABA.
En tanto, Watt’s plantea que de “forma arbitraria e ilegal, el director nacional del SII subrepticiamente crea fuera del Congreso un impuesto ahí donde el legislador evidentemente ha —por años y con justo motivo— evitado hacerlo, con efectos que se extienden mucho más allá de lo meramente tributario, afectando la economía de hogares vulnerables, a productores, contraviniendo políticas de salud pública promovidas hoy por las autoridades del ramo, solo para alcanzar el restringido fin de recaudar más”.
En la circular, el SII recalca que el Ministerio de Salud ha determinado que tanto las bebidas hipotónicas como las bebidas isotánicas y los néctares "son productos que se pueden clasificar como bebidas analcohólicas. dada su composición, siempre que no excedan 0,5% en volumen de alcohol etílico”.
Al respecto de los recursos de protección interpuestos, el SII manifestó que aún no han sido notificados.
PURANOTICIA