La expresidenta del Senado afirmó que este acto "habla de cómo somos como país”.
La solemnidad del acto republicano que supone el cambio de mando presidencial se constituyó en una buena oportunidad para apoyar la existencia del Senado. Una de las figuras políticas que apeló a este sentimiento fue la presidenta saliente de la Cámara Alta, la DC Ximena Rincón, quien señaló que “esta tradición republicana uno espera que siempre se cuide, valore y respete, porque habla de cómo somos como país”.
La expresidenta del Senado, quien fue reemplazada en la testera por el senador y presidente del Partido Socialista, Álvaro Elizalde, llamó a respetar las tradiciones republicanas que, al menos simbólicamente, sostienen a la nación. Una de ellas es, por cierto, la ceremonia en la que el presidente del Senado toma juramento al Presidente entrante y pone la banda presidencial al nuevo inquilino del Palacio de La Moneda.
Ciertamente se trata de una tradición que podría desaparecer, toda vez que la cámara revisora que se encuentra pendiendo de un hilo a juzgar por la discusión que se desarrolla en la Convención Constituyente.
Respecto de la polémica votación por la presidencia de la Cámara Alta, Rincón lamentó en radio ADN que no fuera elegido su correligionario Francisco Huenchumilla. “Pero esto es parte de las negociaciones que se realizan”, señaló. “Lo único que espero es que tengan un buen trabajo, estar en la mesa del Senado no es fácil, es tremendamente complejo”, remató.
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