
Mejía Hernández -identificado inicialmente como Osmar Alexander Ferrer Ramírez- contactó a un conductor de aplicación para viajar desde Estación Central hasta Iquique.
El sicario venezolano Alberto Carlo Mejía Hernández, prófugo por el homicidio del comerciante José Reyes Ossa, conocido como el "rey de Meiggs", habría escapado a Iquique con la intención de abandonar el país.
Según informó anoche 24 Horas, Mejía Hernández -identificado inicialmente como Osmar Alexander Ferrer Ramírez- contactó a un conductor de aplicación para viajar desde Estación Central hasta Iquique.
Para realizar este trayecto, pagó una suma de 2 millones y medio de pesos chilenos, el que realizó la madrugada del pasado 11 de julio, es decir, dos días después de salir del penal Santiago 1 por un error judicial.
El conductor declaró que, en el camino hacia el norte, conversó con Mejía, quien le comentó que su intención era llegar hasta Perú.
Tras conocerse esta información, se realizaron importantes operativos de búsqueda y obtención de información en Iquique, sin que se hayan informado de sus resultados.
Reyes Osses fue asesinado en la comuna de Ñuñoa el 19 de junio pasado. El martes 8 de julio, el OS9 de Carabineros detuvo a los tres sicarios en la comuna de Estación Central.
Los tres fueron formalizados el 9 de julio en el Octavo Juzgado de Garantía de Santiago por homicidio calificado y ese mismo día se produjo la confusión con el primer nombre conocido del sicario Mejía, lo que posibilitó su liberación.
Los sujetos, que pertenecerían al Tren de Aragua, cobraron 30 millones de pesos, pero solo alcanzaron a cobrar $4,5 millones. La PDI aún busca al autor intelectual del crimen.
En la nueva ficha difundida por tanto por Carabineros como la PDI se le describe como un sujeto venezolano, moreno, 1,74 de estatura y con un tatuaje en el dorso de su mano derecha con el rostro del dios mitológico “Zeus”.
Carabineros consignó que en la investigación se le había identificado como Osmar Alexander Ferrer Ramírez, inclusive en conserjería del edificio donde vivía, además de otros lugares y personas que lo conocían.
Luego, al ser detenido se le tomaron las huellas y se enviaron a la Interpol por medio de la PDI, logrando establecer que su verdadera identidad es Alberto Carlos Mejía Hernández.
PURANOTICIA