El parlamentario manifestó que "es bueno colocarse en el escenario de si vamos a seguir juntos o no".
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A minutos de iniciada la Junta Nacional de la Democracia Cristiana, en la cual decidirán si apoyarán el Apruebo o el Rechazo en el plebiscito de salida, el senador Francisco Huenchumilla abordó los rumores de un quiebre en la tienda.
"Es bueno colocarse en el escenario de si vamos a seguir juntos o no. Yo no estoy propiciando una división, pero creo que responsable e insoslayablemente, uno se encuentra en situaciones críticas en la vida en las que tiene que tomar una decisión", manifestó sobre la posición que debe tomar la falange.
Al ser consultado sobre supuestas diferencias personales y si se está perdiendo la tolerancia al interior del partido, dijo: "Creo que hay dos cosas distintas. Una, es que mi manera de aproximarme personalmente a los temas no es una mirada personal. Por lo tanto, no tengo nada personal contra las senadoras, senadores, o distintos personeros que han opinado. Es una discrepancia política sobre las tesis de la mirada que tenemos del país".
"Lo segundo, es que de un tiempo a esta parte, creo que hay un deterioro en la convivencia interna. Hay una pérdida de lo que se llama el affectio societatis al interior de la DC", manifestó.
Bajo ese punto de vista, Huenchumilla indicó que "eso que tradicionalmente se llamaba la fraternidad demócrata cristiana, creo que hoy está en su punto más bajo. Ese es el problema".
Sobre la irreversibilidad de ese punto de discordia, el senador expresó: "Yo hice muchos esfuerzos en los últimos dos o tres años, desde que llegué al Senado, por tener la posibilidad de tener un gran acuerdo nacional, para que cada grupo bajara sus banderas, escondiera los cuchillos bajo la mesa, y pudiera hacerse un acuerdo para modernizar y retomar el partido con vistas a lo que es el mundo del siglo XXI".
"Esos esfuerzos fracasaron, porque lo que ganó fueron los acuerdos grupales, la lucha por el poder interno", sentenció el parlamentario.
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