En la misma línea, aseguró que solo se volvería su uso forzoso "si aumenta el riesgo y si tenemos periodos más agresivos de influenza".
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La mascarilla acompañó obligatoriamente a toda la población chilena desde marzo de 2019 hasta el reciente 1 de octubre, como principal medida para combatir la pandemia de covid-19 que azotó al mundo.
En ese contexto, la ministra de Salud, Ximena Aguilera, realizó un balance a 10 días del fin de su obligatoriedad, afirmando que "las personas lo han tomado muy bien".
"Han seguido las recomendaciones de que en lugares con aglomeraciones siguen usando mascarillas", acotó la secretaria de Estado.
En la misma línea, aseguró que solo se volvería su uso forzoso "si aumenta el riesgo y si tenemos periodos más agresivos de influenza".
"Podríamos retroceder eventualmente, porque es una fase del plan, porque no hemos dado por cerrada la pandemia. En la eventualidad de que aparezca una variante más agresiva, que signifique una mayor cantidad de hospitalizaciones, por supuesto que se va a retroceder", agregó la titular del Minsal.
No obstante, aseveró que no es algo que barajen a corto plazo, pues "vamos bien y seguimos a la baja".
Finalmente, mencionó que desde el ministerio optan por solo recomendar el uso de mascarilla, "porque que sea obligación implica que alguien esté fiscalizando y no siempre tenemos esa capacidad".
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