Marcela Ríos puntualizó que la medida cautelar no fue diseñada para perseguir delitos comunes, sino que para casos que atenten a la seguridad del Estado.
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La ministra de Justicia, Marcela Ríos, se refirió a la figura de la prisión preventiva. En la instancia, la abogada puntualizó que la medida cautelar no fue diseñada para perseguir delitos comunes, sino que para casos que atenten a la seguridad del Estado.
Estas declaraciones se dieron en el marco de un encuentro que la autoridad gubernamental sostuvo con Rodrigo Bustos, director ejecutivo de Amnistía Internacional, quien le presentó el informe anual de Derechos Humanos.
Precisamente sobre el proyecto que busca amnistiar a los detenidos del estallido social que estén en prisión preventiva, Marcela Ríos declaró acerca que la medida cautelar es un problema para el sistema judicial.
En este sentido la autoridad indicó que “compartimos el diagnóstico que la prisión preventiva en Chile, tanto respecto del estallido social como en términos generales, es un problema. Lo estamos conversando y tratando a partir de la Comisión de Revisión del Sistema Penal, es algo que estamos trabajando”.
Asimismo, la ministra de Justicia aseguró que existen “dos preocupaciones centrales, una que la prisión preventiva no se utilice como un castigo anticipado y eso nos preocupa sobremanera, y en segundo lugar tenemos condiciones carcelarias que muchas veces no aseguran el respeto de la dignidad de las personas”.
Finalmente, la abogada sentenció que la medida cautelar de prisión preventiva es mala pues “tendemos a mezclar a personas que están en procesos abiertos con personas que ya han sido condenadas”, sostuvo.
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