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A pesar de esta recomendación, el gobierno decidió comprar de igual manera las casas del ex mandatario, como también la de Salvador Allende
En enero de 2023, el Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio recomendó no comprar las casas del presidente Patricio Aylwin debido al alto impacto en el presupuesto de 2024, a menos que se asignaran nuevos recursos desde el Ministerio de Hacienda. Aunque reconocían el valor patrimonial de los inmuebles, se sugirió priorizar otros espacios si se recibía más financiamiento.
De acuerdo con la investigación realizada por Ciper Chile, a pesar de esta recomendación, en diciembre de 2024, el gobierno compró las dos propiedades de la familia Aylwin Oyarzún por cerca de $1.340 millones y añadió una tercera propiedad, la del presidente Salvador Allende, por $993 millones. Esta compra provocó una investigación por presunto fraude al fisco debido a la implicación de la ministra de Defensa, Maya Fernández, y la senadora Isabel Allende, lo que resultó en una crisis política y judicial.
Ciper accedió a documentos de los ministerios de Bienes Nacionales y de las Culturas que incluían recomendaciones sobre la compra. La minuta del Ministerio de las Culturas sugirió no adquirir los inmuebles a menos que se asignaran nuevos recursos, debido al alto impacto en el presupuesto. Además, se indicó que había otros espacios que podrían priorizarse.
Fuentes al interior de de Bienes Nacionales también discutieron la viabilidad de la adquisición y concluyeron que los recursos disponibles no eran suficientes y había otras prioridades de inversión. En diciembre de 2022, Bienes Nacionales emitió un documento que detallaba el procedimiento y las opciones para concretar la adquisición de los inmuebles de la familia Aylwin.
Finalmente, se optó por la primera opción propuesta, en la que el Servicio Nacional del Patrimonio Cultural solicitó la compra de las casas presidenciales y delegó las gestiones al Ministerio de Bienes Nacionales, siguiendo la sugerencia del jefe de Adquisición y Administración.
Ante la consulta de Ciper sobre la decisión de seguir adelante con la compra, la Presidencia de la República se negó a comentar debido a una investigación en curso. La minuta del Ministerio de las Culturas también señaló que la falta de posesión efectiva de Leonor Oyarzún y la ausencia de recursos proyectados hacían inviable el proceso de compra en ese momento, y que la familia Aylwin Oyarzún podría vender el inmueble en el ámbito privado si no se concretaba la compra.
Miguel Aylwin Oyarzún, uno de los hijos del presidente Patricio Aylwin, explicó en una conversación con el citado medio que la familia no podía preservar las casas patrimoniales y, por lo tanto, consideraron su venta. En septiembre de 2022, el Ministerio de las Culturas recibió la orden de evaluar la compra de las propiedades como una prioridad, tras conversaciones iniciales con el Presidente Gabriel Boric en 2021 y 2022.
En una reunión en septiembre de 2022, Valentina Latorre, jefa de gabinete de la Subsecretaría de Patrimonio Cultural, propuso varios mecanismos para que el fisco adquiriera los inmuebles, incluida la declaración de Monumento Histórico. Ciper consultó a la Subsecretaría si emitieron algún informe al respecto, pero solo se entregó una minuta con información técnica.
Finalmente, se decidió proceder con la compraventa, solicitada al Ministerio de las Culturas y ejecutada por el Ministerio de Bienes Nacionales. Según el presidente de la fundación Patricio Aylwin, Miguel Aylwin, la declaración patrimonial era una opción, pero se optó por la compra.
Miguel Aylwin comentó que, en 2022, la familia enfrentaba problemas de financiamiento para mantener el archivo personal del ex presidente y una de las casas. El presidente Boric expresó su deseo de preservar el valor patrimonial de las casas durante su mandato y decidió proceder con la compra.
Después de varias reuniones y visitas técnicas, se comenzó a trabajar en la documentación para la compra en diciembre de 2022. Se entrevistó a la familia sobre el proyecto de la casa-museo y se entregaron las tasaciones de los inmuebles.
Finalmente, se acordó un precio intermedio de 34.954 UF (cerca de $1.340 millones) por las dos propiedades. La compra de la casa del presidente Salvador Allende también influyó en la transacción, y solo falta la emisión del decreto aprobatorio y la inscripción en el Registro de Bienes Raíces para concretar la compra de las casas de la familia Aylwin.
PURANOTICIA