Bautista, hijo de Ignacio Guerrero, iba a bordo del helicóptero que capotó en el Lago Ranco, donde logró sobrevivir junto a su padre y la hermana del expresidente.
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El pasado martes 6 de febrero, el expresidente Sebastián Piñera perdió la vida al capotar el helicóptero que pilotaba en el Lago Ranco, región de Los Ríos.
Según trascendió, el exmandatario se encontraba junto a su hermana Magdalena Piñera, su amigo Ignacio Guerrero, y el hijo de este, el joven de 23 años Bautista Guerrero, quienes sobrevivieron ilesos a la tragedia que le costó la vida al ex Jefe de Estado.
Ahora, fue el propio Bautista quien entregó su versión de lo vivido la tarde del fatídico martes, detallando que en el viaje de ida al almuerzo en el hogar del empresario José Cox, fue el propio Piñera quien les explicó lo que debían hacer con las puertas de la aeronave en caso de emergencia, lo que sería lo que finalmente les salvaría la vida.
“Apenas momentos del despegue hubo problemas. Por poca visibilidad dimos la vuelta por donde se podría ver mejor sobre la costa y ahí nos topamos con el agua. Lo último que escuché –el joven llevaba puesto auriculares- es que él cambiaría de rumbo. Después pudo haber dicho algo más, pero ya no escuché”, recordó Bautista en conversación con El Mercurio.
Al caer al agua, Bautista desclasificó que el helicóptero quedó inclinado hacia donde se encontraba el exmandatario, quedando esas puertas sumergidas bajo el agua, por lo que la aeronave comenzó a hundirse casi de inmediato.
“Abrí la puerta primero, luego me quité el cinturón y al llenarse el helicóptero salí. Los audífonos se me salieron solos. Fue todo muy rápido. El agua era oscura y profunda”, explicó.
Según su relato, él fue el primero en lograr salir del helicóptero, siendo seguido con mucha dificultad por su padre, Ignacio Guerrero, y luego la hermana del expresidente, Magdalena “Pichita” Piñera.
Una vez en el agua, los sobrevivientes no alcanzaron a llegar por sus propios medios a la orilla, como había trascendido en primera instancia, ya que José Cox y su hijo llegaron rápidamente en lancha para rescatarlos.
Una vez a salvo en la orilla, Bautista relató al medio citado anteriormente que ya no podían ver el helicóptero, el que ya se encontraba completamente sumergido, por lo que tenían más que claro que el expresidente Sebastián Piñera había muerto. “(Estábamos) todos muy mal, con pena, ya sabíamos que había fallecido”, relató.
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