La Fiscalía Metropolitana Centro Norte no sólo indaga el delito sexual denunciado, sino que también si hubo acciones de obstrucción a la investigación.
A una semana de conocido públicamente el caso que protagoniza Manuel Monsalve y la denuncia por presunta violación en su contra, todavía hay hechos en la cronología que son materia de investigación de la PDI y la Fiscalía Metropolitana Centro Norte.
Ante distintas versiones de dichos acontecimientos –que incluso involucran a autoridades de Gobierno– se tienen que definir los pasos que dio el indagado antes de la denuncia y tras su presentación, el lunes 14 de octubre.
En ese marco, no sólo se indaga el delito sexual, sino que también si hubo acciones de obstrucción a la investigación. Parte de las interrogantes es cuál de los cuatro teléfonos incautados al imputado podría contener las pruebas que permitan determinar si hubo una violación y también obstrucción a la investigación.
El diario El Mercurio confirmó con cercanos al caso que, durante la audiencia de cautela de garantías, programada para este miércoles a las 9:00 horas en el 7° Juzgado de Garantía de Santiago, se revisará el acceso a uno de los teléfonos de Monsalve incautados la semana pasada en su domicilio, que se encuentra bajo custodia del tribunal.
Según la defensa, el móvil estaría protegido legalmente, y así se intentará hacer valer ante el tribunal. El juez Ponciano Sallés está a cargo de una decisión que es clave para la fiscalía, ya que busca conocer detalles de los pasos de Monsalve antes del presunto delito de violación y también los posteriores, tarea que repetirá con otros tres artefactos requisados.
La revisión de los celulares no sólo es importante en la investigación de violación, sino también en la arista de obstrucción a la indagatoria, ya que el primer aparato requisado a Monsalve lo habría entregado a funcionarios de la PDI días antes de la denuncia, presuntamente el 11 de octubre.
Ahora se pesquisa si hubo pérdida de información o borrado de datos en esa revisión que se realizó bajo los argumentos de Monsalve de ser presunta víctima de un delito, y que se enmarca en el informe policial de inteligencia solicitado por la exautoridad, en el ejercicio de su cargo, que incluyó el levantamiento de imágenes de cámaras de seguridad, en el Hotel Panamericano y el restaurante Ají Seco Místico, por hechos del 22 y 23 de septiembre, sin orden judicial y de la fiscalía.
Hasta ahora, desde el círculo cercano del ex subsecretario Manuel Monsalve han descartado cualquier tipo de pérdida de información.
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