Esto pone en jaque su aprobación, ya que algunos parlamentarios se encuentran de viaje y otros con permiso sin goce de sueldo.
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El gobierno comunicó este miércoles que el presidente Sebastián Piñera le puso discusión inmediata al proyecto del cuarto retiro del 10% de los fondos previsionales.
El Ejecutivo justificó su decisión en la “imperiosa necesidad que el Honorable Congreso Nacional zanje, a través de su pronta votación y a la mayor brevedad posible, el rechazo de la presente propuesta de reforma constitucional”.
La idea es “obtener certeza jurídica para reducir los impactos financieros, inflacionarios, de tasas de interés, entre otros efectos macroeconómicos, que genera la prolongación de su discusión y, más aún, su eventual y negativa aprobación”.
De esta manera, la discusión de la iniciativa en el Congreso se dividirá con dos días en la Cámara de Diputados, dos días para la Comisión Mixta y dos días para el Senado.
También, el objetivo es acortar los plazos, por lo que la votación se debería concretar sin esperar el informe de la comisión, cuyo envío estaba pactado recién para este viernes 3 de diciembre.
Con el recurso presentado por el gobierno, solo bastaría un certificado para que la Cámara Baja someta a votación los resultados de la instancia.
Bajo este contexto, el retiro sería votado durante esta semana por diputadas y diputados, donde no tendría los votos necesarios.
La Comisión Mixta despachó este martes el proyecto del cuarto retiro para su segunda tramitación en el Congreso. La mesa presidida por el senador Pedro Araya acordó que el informe final deberá votarse como un todo y no ser sometido a discusiones en particular.
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