
La ex edil aseguró que colaborará en la campaña presidencial de la candidata del oficialismo.
Esta semana se decretó el sobreseimiento de todos los imputados en el caso Sierra Bella, entre ellos la exalcaldesa de Santiago, Irací Hassler. Aunque no se acreditaron delitos ni se formalizaron cargos, la exautoridad comunal asegura que “el daño está hecho”, en referencia al impacto político que, según ella, tuvo la investigación en su carrera.
En entrevista con Radio Biobío, la exalcaldesa sostuvo que “el proceso judicial se extendió por cerca de dos años estuvo marcado por filtraciones de información que debieron haberse resguardado”.
Por lo mismo, Hassler presentó una querella para esclarecer si funcionarios de la Policía de Investigaciones (PDI) o el fiscal Patricio Cooper estuvieron detrás de la divulgación de conversaciones privadas, las que -a su juicio- “no tenían valor investigativo, pero sí posibles efectos políticos”.
También Hassler lamentó que el cierre del caso se haya producido después de las elecciones municipales, en las que fue derrotada por Mario Desbordes. Atribuyó parte de ese resultado “al desgaste público generado por la causa judicial”, que calificó como una “acusación falsa y sistemáticamente abordada por autoridades políticas en medios de comunicación”.
La exalcaldesa también criticó al Partido Republicano, acusándolo de haber impulsado el caso con fines políticos y de actuar “a través de la mentira”. Aseguró que “el uso de la justicia como herramienta de desinformación y daño reputacional representa un problema profundo para la democracia”, y llamó a generar conciencia y cambios éticos en la política.
Respecto al fiscal Cooper, Hassler cuestionó el manejo de la investigación, especialmente “por la inclusión de conversaciones privadas en informes policiales que luego fueron filtrados a la prensa”. También apuntó al alcalde Desbordes, quien habría recibido y divulgado información reservada, y que ya declaró como imputado en la causa por violación de secreto.
En paralelo, la exalcaldesa confirmó su precandidatura a la Cámara de Diputadas y Diputados por el Partido Comunista, asegurando que “las conversaciones internas buscan asegurar dos cupos en el distrito 10”. En ese contexto, respaldó la candidatura presidencial de Jeannette Jara, señalando que “no puede hacerse cargo de cada opinión de miembros de nuestro sector. La voz principal es Jeannette”.
Aseguró que colaborará en la campaña presidencial de la candidata del oficialismo, destacando que se trata de una candidatura que “plantea una posibilidad de mejora de la vida de los chilenos y chilenas en los años que vienen”.
Sobre las tensiones al interior de la coalición, defendió la autonomía de Jara y abordó los cuestionamientos en torno al machismo político: “Hay liderazgos femeninos que enfrentan críticas que no se les harían a los hombres”, afirmó.
Consultada por las declaraciones de Daniel Jadue respecto a una eventual salida de Jara del PC, la exalcaldesa enfatizó que “la voz principal hoy la lleva Jeannette” y llamó a no atribuirle afirmaciones ajenas.
Respecto a la situación en el Barrio Meiggs, lamentó el “retroceso” en ordenamiento urbano y criticó la “ausencia de gestión” del actual alcalde Mario Desbordes. “No hay autos de seguridad en la Plaza de Armas y se han abandonado políticas pioneras como el Sistema Barrial de Cuidados”, sostuvo.
Finalmente, se refirió al informe de la Contraloría General que detectó irregularidades en el pago de horas extraordinarias, asegurando no estar involucrada y apuntando directamente al diputado Agustín Romero: “Le ordenaron pagar más de 11 millones de pesos. Es importante que cumpla, porque no predica con el ejemplo”.
PURANOTICIA