El trabajo realizado arrojó que el 37% de los chilenos no sigue ninguna de las recomendaciones entregadas por el Ministerio de Salud, mientras que el 32% cumple solo con una recomendación; y apenas el 17% cumple con dos.
Una investigación a nivel nacional reveló que el 86 por ciento de la población, es decir, casi nueve de cada 10 personas, tienen una mala o muy mala alimentación, debido a que no cumplen las recomendaciones básicas que entrega el Ministerio de Salud a través de las guías alimentarias.
Estas pautas aconsejan un consumo diario de al menos tres porciones de verduras, dos de frutas y tres de lácteos sin azúcar añadida, junto con pescados y legumbres al menos dos veces a la semana.
Según publica hoy El Mercurio, el trabajo realizado por la Escuela de Nutrición y Dietética de la Universidad de los Andes, arrojó que el 37% de los chilenos no sigue ninguna de las recomendaciones entregadas por el Ministerio de Salud, mientras que el 32% cumple solo con una recomendación; y apenas el 17% cumple con dos.
“Estos alimentos contienen nutrientes y propiedades protectoras contra el exceso de peso y enfermedades crónicas, como la diabetes e hipertensión, que son altamente prevalentes en nuestro país. Sin embargo, vemos que la ingesta de estos es muy baja en la población, tanto en cantidad y en frecuencia, por lo que la dieta no estaría entregando el aporte necesario”, sostuvo Sofía Sutherland, académica que trabajó en el sondeo.
Otro de los resultados es que solo el 1% de los encuestados cumple con las cinco recomendaciones analizadas de las guías del Minsal. De estas, el consumo de legumbres es el que obtiene el mayor porcentaje, ya que el 32% asegura comer dos o más porciones por semana.
En cuanto a las frutas, solo el 30% de la población las comen con la frecuencia debida.
Respecto a los pescados y mariscos, el 19% de los entrevistados los incluye en su alimentación dos o más veces por semana.
En la misma línea se encuentran los lácteos, ya que solo el 12% de la población cumple con lo aconsejado por las guías, que son tres o más porciones diarias.
“El bajo consumo de lácteos en la población adulta es preocupante. Las sugerencias actuales indican incluirlos en la alimentación en todas las etapas de la vida, por sus múltiples beneficios, su aporte de calcio y prevención de enfermedades como la osteoporosis. Pero si el consumo de lácteos en la población es bajo, podría ocurrir que el impacto de esta medida de salud pública no sea la esperada”, sostuvo Sutherland.
Karen Salvo, nutrióloga de la Clínica Alemana, quien no fue parte del estudio, comentó que “el costo de los alimentos es una preocupación para muchos. El pescado se sabe que está muy caro, al igual que muchas frutas. También debemos pensar en cuánto tiempo está teniendo la gente para cocinar, porque preparar un plato de legumbres requiere tiempo”.
El estudio “Nutrición de los Chilenos 2023” se realizó por medio de encuestas a 1.211 hombres y mujeres de Chile, de 18 años o más, y de 170 comunas del país, lo cual es una muestra representativa de la población nacional.
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