Desde la colectividad argumentaron que en el proyecto “no se logran satisfacer puntos clave y que se establece un préstamo poco claro al Estado, lo que pone en duda que esto sea una solución concreta para aumentar las pensiones ni para fomentar el empleo".
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El Partido Social Cristiano confirmó su postura contraria al acuerdo aprobado en la Comisión de Trabajo y Previsión Social del Senado luego de las indicaciones presentadas por el Ejecutivo y anunció que todos los parlamentarios votarán en contra de la reforma previsional.
Desde la colectividad argumentaron que “no se logran satisfacer puntos clave y que se establece un préstamo poco claro al Estado, lo que pone en duda que esto sea una solución concreta para aumentar las pensiones ni para fomentar el empleo".
La presidenta del partido, diputada Sara Concha, indicó que “en ningún caso queremos defender a las AFP, sino que estamos a favor de los trabajadores que reúnen sus recursos con esfuerzo, a quienes a través de un acuerdo cerrado entre el Gobierno y Chile Vamos se les va a pegar un manotazo a sus fondos".
Además, confirmó que “no estamos a favor que la clase media solvente esta reforma, ya que creemos que los fondos deben ir a capitalización individual. Concordamos que las pensiones son bajísimas, pero está demostrado que el Estado es un mal administrador de recursos públicos".
En tanto, la diputada Francesca Muñoz señaló que “como partido estamos por subir las pensiones, pero no nos parece cómo se dio este acuerdo, acá se está empujando una reforma express y de manera irresponsable. Nos quedan dudas de cómo las pymes van a poder lidiar con esto”.
En esa línea, Roberto Arroyo comentó que “las consecuencias de este acuerdo los veremos en poco tiempo, traducido en una quiebra de pequeñas empresas y un aumento del desempleo”.
Lo mismo se cuestionó la diputada Yovana Ahumada, tras advertir que “esto va a tener una afectación en las pymes que nadie ha pensado, estoy en contra por el manotazo que se da a los ahorros por este retiro o préstamo que se le va a hacer al Estado sin preguntarle a nadie".
En tanto, el senador Rojo Edwards aseguró que "este es un mal acuerdo ya que, en lo medular, es la introducción de un reparto camuflado y va a disparar la deuda pública. Pese a los avances, el proyecto aún busca ser financiado por la clase media que está por debajo del tope imponible, afectando directamente sus ahorros y propiedad privada".
Finalmente, Juan Castro, también senador, argumentó que “el 6% tiene que ir a capitalización individual. El trabajador no puede estar prestando dinero al Estado. Eso no corresponde".
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