
Josefina Huneeus, exesposa de Alberto Larraín, describió con detalle lo que calificó como el funcionamiento personalista y sin contrapesos de la Fundación ProCultura.
Durante una extensa declaración ante el fiscal Ricardo Soto, la siquiatra Josefina Huneeus, exesposa de Alberto Larraín, describió con detalle lo que calificó como el funcionamiento personalista y sin contrapesos de la Fundación ProCultura. Según sus palabras, Larraín tenía el control absoluto de la organización: “hacía y deshacía todo él mismo” y el supuesto directorio “era de papel”.
La declaración, según información de diario La Tercera, entregada el 19 de noviembre de 2023 ante la PDI, fue realizada en calidad de imputada y acompañada por su abogado, Alejandro Awad. En ella, Huneeus relató que nunca tuvo un vínculo contractual ni económico con la fundación, aunque conocía a varios de sus integrantes. “Nunca jamás. Solo recibí desde la cuenta personal de Alberto la pensión alimenticia pactada con él (…) y del proceso de liquidación de la sociedad conyugal recibí $130 millones”, afirmó.
Respecto al rol de quienes integraban el directorio de la fundación, la exesposa de Larraín fue enfática: “No tomaban ninguna decisión. En mi opinión, no sabían nada de lo que se realizaba. Además no había modelo de negocios más que en la cabeza de Alberto”.
Durante la declaración también surgieron antecedentes sobre el entorno político de Larraín. Según Huneeus, él habría conocido al presidente Gabriel Boric en un contexto político, asesorándolo en salud mental cuando era diputado. “No había, hasta donde sé, mayor cercanía que esa”, dijo. También indicó que Irina Karamanos fue contratada para trabajar en un convenio con la fundación hasta fines de 2021.
Consultada por el fiscal sobre si Larraín se presentaba como el siquiatra del Presidente, Huneeus lo desmintió tajantemente: “No sabía que Alberto decía eso, y no es verdad, porque a mí me consta que el siquiatra de Gabriel Boric era otra persona”.
Sobre un eventual nombramiento en el primer gabinete del actual Mandatario, la psiquiatra señaló: “Sí, sé que estaba en algunas listas de ministerios. De hecho, a mí me preguntaron mi opinión de él y no di una buena referencia. Creo que es una persona que vela por sus propios intereses y en ese aspecto no es políticamente funcional”.
Finalmente, al ser consultada sobre hechos que le llamaran la atención respecto al funcionamiento de la fundación, mencionó que el padre de Larraín habría comprado una casa en Limache que luego fue arrendada a ProCultura. También señaló que un funcionario, de nombre Enrique, cumplía funciones como asistente personal de Larraín incluso fuera del horario laboral, y que los viajes a Rapa Nui incluyeron pasajes en categoría business para su pareja, su asesora del hogar y otros cercanos.
PURANOTICIA