Esposas, hijos y conocidos de algunos parlamentarios usan el beneficio fiscal, a pesar de que que no está permitido para fines distintos a las labores legislativas.
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Un reportaje de Ciper Chile reveló que esposas, hijos y conocidos de diputados están utilizando sus tarjetas de carga de combustible, pese a que su uso está prohibido para fines distintos a las labores legislativas. Es decir, sólo puede ser utilizado por los mismo parlamentarios y sus respectivos asesores.
Uno de los involucrados es el diputado Cristóbal Urruticoechea, del Partido Republicano, cuya esposa, hijo y hasta un ex candidato a Concejal de Los Ángeles fueron registrados cargando bencina con su tarjeta. Incluso, su cónyuge, Tamara Küpfer Moller, registra 38 usos.
Lo mismo ocurre con sus pares, las diputadas Claudia Mix (Comunes) y Viviana Delgado (Partido Ecologista Verde), ya que aparecen utilizando la tarjeta su hija y marido, respectivamente.
El sistema –financiado con recursos públicos– fue implementado el año 2018 en reemplazo a la rendición de facturas. Asigna un monto, un RUT y una patente, con el objetivo de generar un mecanismo de control de gastos más estricto. Se le entrega a cada legislador tarjetas de Copec, Shell y Petrobras, las cuales son personales e intransferibles, con cupo mensual limitado.
Quien carga la tarjeta debe dictar su RUT y una clave al bombero que lo atiende, el cual debe dejar anotada la cifra que figura en el odómetro. Sin embargo, el reportaje advirtió que el control no es difícil de burlar.
A modo de ejemplo, el hijo del diputado republicano, Ignacio Urruticoechea Küpfer, realizó una carga que dejó una numeración en el odómetro que no calzaba. Su cuenta-kilómetros anotó 8.458, mientras que el registro anterior –del vehículo de su padre– marcó 160.376 kilómetros.
También se menciona el caso del diputado Boris Barrera, del Partido Comunista, quien denunció que le robaron una tarjeta en enero 2020. Con ella se realizaron cargas por $1,7 millones durante todo ese mes, las cuales fueron asociadas al vehículo del parlamentario en el registro oficial, pese a que fueron utilizadas para otros automóviles.
En tanto, el ex presidente de la Cámara Baja, diputado Diego Paulsen, de Renovación Nacional, aparece cargando $32.000 en bencina en Temuco al mismo tiempo que participaba en una sesión, el 26 de mayo de 2020. Al respecto, el parlamentario de Chile Vamos explicó que le entregó la tarjeta a su jefe de gabinete.
El secretario de la Cámara, Miguel Landeros, aseveró que si un familiar o un cercano a los diputados realiza cargas de combustible, se debe realizar un cobro por devolución. Sin embargo, indicó que "nunca se ha hecho un cobro por devolución cuando ha habido un familiar cargando".
Además, Landeros acusó que “cuando el RUT que aparece en la carga es de un familiar, les preguntamos a los diputados y ellos dicen que van con el familiar a bordo del vehículo”.
El reportaje menciona también que el staff permanente del Congreso cuenta con choferes que pueden cargar bencina con las tarjetas. Sin embargo, tres de estos conductores usaron el beneficio en febrero entre 2021 y 2022, cuando el Parlamento está en receso. Al respecto, Landeros aseveró que serían visitas a La Moneda de algún presidente o vicepresidente de la mesa directiva.
Una vez conocido el reportaje, tanto la diputada Claudia Mix como el diputado Cristóbal Urruticoechea negaron haber hecho mal uso de la tarjeta para cargar combustible que se les entrega por ser parte de la Cámara Baja.
La primera señaló a Emol que "no poseo licencia de conducir ni cuento con un conductor, por tanto mis traslados siempre los realiza otra persona y corresponden estrictamente a mis funciones como Diputada".
Asimismo, aclaró que el auto inscrito es el suyo personal, "el cual se ocupa para varias tareas legislativas y distritales en las cuales debo estar presente".
Además, propuso que para "evitar una futura confusión o, de plano, una acusación de falta de probidad en el uso de estos recursos", propondrá a la Cámara que las bencineras soliciten el rut de los parlamentarios en la carga de combustible, de modo que "el uso de éste sea intransferible y no quepa duda de que el transporte está dirigido estrictamente a nuestras labores y no a beneficios personales o de terceros".
Urruticoechea, en tanto, atribuyó las acusaciones del reportaje a la "prensa de izquierda" y señaló que "quiero descartar absolutamente cualquier irregularidad".
De igual forma, expuso que "las tarjetas de combustible sólo pueden ser utilizadas en los vehículos que están destinados para el trabajo político y territorial de los Diputados, y en mi caso, éste es mi segundo periodo y jamás he usado esas tarjetas para comprar combustible para mi auto familiar o el de mis hijos".
Junto a asegurar que "es imposible hacerlo", Urruticoechea dijo que "estoy consciente de que mis posiciones y convicciones generan molestia y rabia en la izquierda, y que están dispuestos a mentir para atacarme. Lo que no es correcto es que usen a mi familia para ese propósito y por eso he considerado indispensable hacer esta aclaración".
PURANOTICIA
