
“La democracia no se reconstruye entre aliados complacientes, sino enfrentando verdades incómodas y rindiendo cuentas ante la ciudadanía”, señalaron en una carta publicada.
La cumbre “Democracia Siempre”, que reúne este lunes a los mandatarios de Brasil, Colombia, Uruguay, España y Chile, ha generado toda clase de críticas desde la oposición.
Y un nuevo capítulo se escribió, cuando un grupo de parlamentarios de España, Colombia, Uruguay y Chile envió una carta a El Mercurio, cuyo fin es insistir en los reparos de la cita que congrega este lunes en La Moneda a Luiz Inácio Lula da Silva, Gustavo Petro, Yamandú Orsi, Pedro Sánchez y Gabriel Boric.
El texto es firmado por Diego Schalper (RN) como vicepresidente ejecutivo de la IDU (International Democracy Union); Ildefonso Castro López, secretario de Relaciones Internacionales del Partido Popular (PP) de España; Efraín Cepeda Sarabia, presidente del Senado de Colombia; Juan Martín Rodríguez, secretario general del Parlamento Latinoamericano y Caribeño; Álvaro Delgado Ceretta, senador de Uruguay y presidente del Partido Nacional; y Nadia Blel Scaff, senadora de Colombia y presidenta del Partido Conservador.
En su contenido más relevante, la misiva sostiene que “la convocatoria agrupa a autoridades que en su mayoría han degradado la institucionalidad, evadido controles constitucionales, perseguido el disenso político, relativizado los derechos humanos por conveniencia ideológica y que enfrentan en varios casos investigaciones por corrupción, tráfico de influencias, mal uso de fondos públicos e incluso vínculos con estructuras de crimen organizado”.
“Lejos de promover el fortalecimiento de la democracia, esta cumbre aparece como un intento de dar legitimidad política a quienes hoy enfrentan profundas crisis de credibilidad en sus propios países”, agrega.
“Es evidente que muchos de los asistentes no buscan construir acuerdos ni soluciones reales a los problemas que enfrentan sus pueblos, sino que buscan blindarse, buscan respaldo internacional frente a sociedades que los interpelan por sus abusos, sus promesas incumplidas y la corrupción que les rodea”, continúa la misiva.
“En lugar de trabajar por mejorar la vida de sus ciudadanos, muchos de estos líderes han concentrado energías en sostenerse en el poder a toda costa. La democracia, en estos casos, se ha convertido en un recurso discursivo o táctica y no en una convicción de fondo”, complementa.
“Rechazamos con firmeza la realización de esta cumbre, advertimos sobre sus implicancias políticas y expresamos nuestra convicción de que la democracia no se reconstruye entre aliados complacientes, sino enfrentando las verdades incómodas y rindiendo cuentas ante la ciudadanía. La democracia no se declama. Se demuestra”, finaliza el texto.
PURANOTICIA