
El equipo liderado por el defensor penal público Víctor Providel optará por presentar un recurso de amparo constitucional, con el objetivo de llevar el caso hasta la Corte Suprema.
Tras cuatro meses de prisión preventiva y un nuevo revés judicial, la defensa de Manuel Monsalve decidió dar un giro en su estrategia legal. En vez de apelar a la Corte de Apelaciones de Santiago por la reciente decisión que mantuvo su privación de libertad, el equipo liderado por el defensor penal público Víctor Providel optará por presentar un recurso de amparo constitucional, con el objetivo de llevar el caso hasta la Corte Suprema.
La medida se concreta luego de que el pasado martes el 7° Juzgado de Garantía de Santiago, bajo la resolución de la jueza Carla Capello, rechazara sustituir la prisión preventiva que pesa sobre el exsubsecretario del Interior, imputado por el presunto delito de violación en contra de una funcionaria subalterna. Desde entonces, el defensor tenía un plazo de cinco días para apelar, el cual vencía este lunes a las 23:59 horas.
Sin embargo, tras reunirse con la exautoridad en la cárcel Capitán Yáber la semana pasada, Providel decidió no seguir por la vía tradicional. Según cercanos al caso, el propio Monsalve habría mostrado reticencia a enfrentar otra derrota en tribunales, luego del contundente rechazo de la Novena Sala de la Corte de Apelaciones en noviembre pasado, cuando su defensa anterior intentó revertir la medida cautelar. En esa oportunidad, el fallo fue unánime.
“El amparo tiene otra línea argumentativa, que tú sin centrarte en la discusión de los hechos propiamente tal, te vas más bien a una privación de libertad ilegal. Y en tanto que es ilegal, la Constitución te permite ir a la corte y si hay un rechazo, te permite apelar en la Excelentísima Corte Suprema”, explicó a La Tercera el exfiscal José Villalobos, en referencia a la estrategia adoptada por la defensa.
En concreto, lo que busca este recurso es cuestionar la legalidad de la prisión preventiva desde el punto de vista de los derechos fundamentales. Según la exfiscal Erika Maira, si se recurre al amparo, “lo que debe demostrar la defensa es que la privación de libertad de su representado no se encuentra justificada o bien no existen antecedentes suficientes, razonados y serios que permitan entender que hay presunciones fundadas de su participación” en los hechos.
Además, la abogada agregó que el defensor deberá evidenciar que no existen motivos válidos para sostener que la libertad de Monsalve represente un peligro para la sociedad o para el curso de la investigación.
Uno de los elementos que debilitó la reciente solicitud de libertad fue un peritaje de la PDI al teléfono de Monsalve, el cual habría sido utilizado la noche en que se reunió con la denunciante, el 22 de septiembre. Según la Fiscalía Centro Norte, que lidera la investigación, los datos extraídos del dispositivo descartan el “borrón” y la “pérdida de conciencia” alegados por el imputado, ya que se comprobó que incluso usó el teléfono para reproducir música.
Dicho antecedente fue clave para que la jueza Capello considerara que la defensa no presentó elementos nuevos en la audiencia de revisión de medidas cautelares, lo que terminó consolidando la prisión preventiva.
Ahora, con el amparo como vía elegida, la defensa de Monsalve espera que el caso pueda llegar al máximo tribunal del país. Si la Corte Suprema también rechaza el recurso, el equipo legal podría volver a insistir en una futura audiencia de revisión, pero solo si logra presentar nuevos elementos que justifiquen un cambio en la medida cautelar.
PURANOTICIA