El secretario de la Convención, John Smok, informó que por 6 votos, 1 en contra y 1 abstención, se decidió someter a votación la indicación y suspender el Pleno hasta el lunes para retomar las enmiendas que no fueran compatibles con el polémico texto.
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Un tenso momento se vivió en la Convención Constitucional este viernes. Después de haber aprobado el Reglamento General y de Ética, el Pleno comenzó a dirimir las cerca de 123 indicaciones al reglamento de Participación y Consulta Indígena. Sin embargo, una propuesta para reemplazar todo el texto aprobado desató la polémica.
Suscrita por más de 80 representantes de los Pueblos Originarios, Colectivo Socialista, Frente Amplio, Partido Comunista, Movimientos Sociales Constituyentes y Pueblo Constituyente, el injerto consistía en modificar por completo los 25 artículos que se aprobaron durante la votación en general.
La idea fue duramente criticada por integrantes de Vamos por Chile, quienes acusaron que no se iban a poder realizar modificaciones futuras y comenzaron a discutir con quienes respaldaban la propuesta.
En ese contexto, la mesa directiva compuesta por Elisa Loncon y Jaime Bassa decidió suspender la sesión por una hora con el fin de abordar la situación en una reunión con la mesa ampliada y los PP.OO.
Después del encuentro, el secretario de la Convención, John Smok, informó que por 6 votos, 1 en contra y 1 abstención, se decidió someter a votación la indicación y suspender el Pleno hasta el lunes para retomar las enmiendas que no fueran compatibles con el polémico texto.
De esta forma, la controversial modificación fue aprobada por 103 votos a favor, 20 en contra y 22 abstenciones.
Durante la discusión, el convencional Manuel José Ossandón Lira (RN), señaló que "la indicación sustitutiva es mejor que el Reglamento aprobado en general hay que decirlo con sinceridad, pero al mismo tiempo altera la naturaleza de lo que realmente constituye una indicación. Y por lo tanto no puede votarse como una indicación más con solo 2 minutos de debate".
“Esto es un quebrantamiento grave de la confianza. Sin embargo el hecho de que se pueda discutir esto como lo que realmente es, que es básicamente un nuevo Reglamento, permite recuperar dicha confianza para construir un proceso constitucional abierto a la ciudadanía, abierto al diálogo y pluralista”, añadió.
En tanto, el constituyente Eduardo Cretton (UDI) acusó: “¿Qué pasó con las 69 audiencias públicas que escuchamos en la comisión? ¿Qué pasó con las más de las 22 sesiones y con el trabajo realizado por más de un mes por quienes fuimos parte? Todo esto se fue al tacho de la basura y vamos haciendo cocina, sí cocina, de esa sucia”.
Entre los defensores de la indicación estuvo la convencional Rosa Catrileo (Pueblos Originarios), quien remarcó: “No existe ninguna disposición, norma o alguna práctica convencional que señale las formas que deben tener las indicaciones. No existe por otro lado número de firmas máximo. Me parece un error cuestionar el apoyo transversal que una indicación pueda tener”.
En la misma línea, Félix Galleguillos (pueblo Lican Antay) aseguró que “pedimos la justicia e igualdad que se nos ha negado. Los PP.OO. siempre hemos visto los procesos políticos desde la galería. Hoy por primera vez estamos aquí, no como espectadores, si no elegidos democráticamente. Si no defendemos nuestros derechos como PP.OO, ¿quién lo hará por nosotros?”.
Frente a la discusión, Loncon indicó que “desde los PP.OO. no hay ninguna intención de dañar el trabajo de la CC. Hay una lógica distinta de cómo establecer acuerdo. Creo que eso primó en la indicación que se presentó”.
“No hay una intención de cocina, al contrario, como lo señaló Rosa (Catrileo), más bien se elaboró una indicación, y el mayor orgullo de la indicación es que teníamos una indicación apoyada transversalmente y fíjense que hay otros reglamentos con indicaciones apoyadas transversalmente con más de 50 firmas”, añadió.
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