Se trata de los capítulos sobre los fundamentos del orden constitucional; los derechos y libertades fundamentales, garantías y deberes constitucionales; y el acápite de representación política y participación.
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El pleno de la Comisión Experta aprobó en general los primeros tres capítulos de la propuesta de nueva Carta Magna que será sometida a consideración del Consejo Constitucional, a contar de mayo próximo.
Se trata de los capítulos sobre los fundamentos del orden constitucional; los derechos y libertades fundamentales, garantías y deberes constitucionales; y el acápite de representación política y participación.
Después de casi cinco horas de debate en el pleno, los expertos aprobaron por unanimidad los tres capítulos, lo que ya se daba por descontado debido a que fueron elaborados de consenso como un “mínimo común constitucional”.
Sin embargo, tanto desde el oficialismo como de la oposición anunciaron enmiendas para hacer modificaciones, eliminar normas y cambiar varios artículos, ya que el consenso fue solo para avanzar en el texto, porque las diferencias existen.
De hecho, la discusión más enérgica en el pleno, de carácter ideológica, se dio en torno a los principios del Estado, especialmente su carácter de estar al servicio de la persona. La oposición logró imponer como principio la dignidad de la persona por sobre el Estado.
Otro punto a favor de la oposición fue que se estableció a la familia como núcleo fundamental de la sociedad. En cambio, la gran derrota del oficialismo consistió en que no se incluyó el Estado social en el primer capítulo.
Al respecto, el experto Domingo Lovera criticó que “no se entiende la razón para que el reconocimiento de Chile como Estado social no se incluya en el primer artículo. Es ese Estado, el social, el único que estará en condiciones de resguardar la libertad y la igualdad de las personas”.
Por lado de la oposición, la experta Marcela Peredo (Ind.-RN) señaló que “el capítulo de principios resulta relevante a partir del consenso alcanzado y destacar que mantiene una tradición constitucional tanto nacional como comparada en que la persona es el centro de los principios constitucionales y por ende el Estado está al servicio de ellas”.
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