
El Instituto Nacional de Estadísticas (INE) informó que la tasa de desempleo en Chile alcanzó un 8,9% durante el trimestre marzo-mayo, marcando un incremento de 0,6 puntos porcentuales respecto al periodo anterior.
El Instituto Nacional de Estadísticas (INE) informó que la tasa de desempleo en Chile alcanzó un 8,9% durante el trimestre marzo-mayo, marcando un incremento de 0,6 puntos porcentuales respecto al periodo anterior.
El aumento se explica por un crecimiento de la fuerza de trabajo (0,8%) superior al de los ocupados (0,2%), lo que evidencia que el mercado laboral no logra absorber la demanda por empleo.
El número de personas desocupadas llegó a 917 mil, la cifra más alta desde el periodo febrero-abril de 2021. Solo se crearon 14.500 nuevos empleos, el registro más bajo desde la crisis sanitaria.
Regiones más afectadas:
- Tarapacá: 10,7% de desempleo, con una caída sostenida del empleo formal en el comercio.
- Ñuble: 10,4%, con desempleo femenino en 11,3%.
- La Araucanía: 9,8%.
- Atacama: 9,7%.
- Región Metropolitana: 9,5%.
- O’Higgins y Biobío: 9%.
Juan Bravo, director del OCEC-UDP, calificó el caso de Tarapacá como el más crítico, con siete meses consecutivos de destrucción de empleo. En esa región, el desempleo femenino alcanza el 11,2%, según consigna La Tercera.
Economistas como Carmen Cifuentes (Clapes UC), Patricio Ramírez (Universidad de La Frontera) y David Bravo (UC) coinciden en que el país enfrenta una crisis laboral estructural que no ha sido reconocida por el gobierno. Alertan sobre indicadores preocupantes como el desempleo de larga duración, el subempleo y la baja creación de empleo formal.
Patricio Ramírez, coordinador del Observatorio Económico Social de la Universidad de La Frontera, plantea que “esta situación revela un debilitamiento generalizado del mercado laboral que es transversal a los territorios, es decir, el problema del empleo no está centrado solo en un par de regiones, ni está focalizado solo en alguna macrozona del país, sino más bien está presente en la mayoría de las regiones”.
Carmen Cifuentes, economista de Clapes-UC añadió que “estas cifras confirman el deterioro persistente del mercado laboral chileno. El desempleo a nivel nacional ha alcanzado su nivel más alto desde que se tiene registro comparable, excluyendo el periodo más crítico de la pandemia. Esta situación también afecta a las regiones, muchas de las cuales enfrentan escenarios igualmente complejos”.
David Bravo, economista y director del Centro de Encuestas y Estudios Longitudinales de la UC, menciona que “se trata de una situación que objetivamente refleja problemas y una crisis en el mercado laboral que las autoridades no han reconocido como tal y en coherencia con ello, no se han hecho cargo, manteniendo, al mismo tiempo, una agenda que ha apuntado a incrementar los costos laborales sin atender a la inconveniencia de esto en el marco de una crisis laboral”.
Para Ingrid Jones, economista de LyD, “se requiere centrar la discusión en crecimiento económico y creación de empleos formales. No es suficiente por ejemplo rediseñar los subsidios al empleo, se deben en primer lugar generar las condiciones para que las empresas puedan crecer, contratar a trabajadores y ser capaces de mantenerlos de manera orgánica, aun cuando ya no exista el subsidio”.
Medidas propuestas:
- Aprobación urgente del Subsidio Unificado al Empleo.
- Aceleración de proyectos regionales que demanden mano de obra.
- Revisión de políticas que aumentan los costos laborales.
- Impulso al crecimiento económico para sostener la recuperación del empleo.
Los especialistas advierten que, sin una agenda laboral robusta y una estrategia de reactivación clara, el deterioro del mercado laboral podría profundizarse en los próximos meses.
PURANOTICIA