El impacto se produjo pese a que la compañía alcanzó una producción récord y el trimestre abril-junio fue el mejor de su historia, reportando 52 mil toneladas en ese período
La disminución del precio del litio en un 50,9% en la primera mitad del año obligó a SQM a reducir en un 80% los pagos a Corfo, según declaran los estados financieros del primer semestre de 2023.
En ese periodo, la empresa perdió US$ 653 millones y en el segundo trimestre, según reportó ayer, anotó ganancias por USS 213 millones, un 63% menos que en igual lapso de 2023, cuando había obtenido US$ 580 millones. En el balance global, sin embargo, impactó un efecto contable derivado de pago de impuestos que están en controversia judicial con el Servicio de Impuestos Internos, contabilizado en el primer trimestre. Y aunque operacionalmente sigue ganando dinero, las rentas del litio son bastante menores.
Según publica La Tercera, todo se explica por el litio, un producto que en el extraordinario 2022 explicó más del 80% de sus ventas, pero que en este año equivale solo a la mitad: un exacto 50,9% en la primera mitad del año.
El resto fue aportado por el yodo, el potasio y los fertilizantes de especialidad. Y el impacto del litio se produjo pese a que la compañía alcanzó una producción récord y el trimestre abril-junio fue el mejor de su historia: nunca había producido tanto como las 52 mil toneladas reportadas en ese período. El factor, entonces, estuvo en el precio de venta.
SQM vendió a un promedio de US$ 12.700 cada tonelada en el período abril-junio, un valor inferior en 62% a los US$ 34 mil del segundo trimestre de 2023. Lo mismo había reportado en el primer trimestre, pero con un descenso mayor: vendió a US$ 12.600 entre enero y marzo, 73% menos que los casi US$ 51 mil del primer cuarto de 2023.
Así, si en 2024 el precio de venta promedia US$ 12.650, en la primera mitad de 2023 estuvo sobre los US$ 42 mil. El descenso del precio del litio es un fenómeno global que ha afectado también la cotización de la acción de SQM y sus competidores.
Y todo ello también impactó en los aportes que SQM entrega a Corfo como canon de arrendamiento por las pertenencias que el fisco arrienda a la empresa hasta 2030 en el Salar de Atacama: más de mil millones de dólares menos.
PAGOS A CORFO
Los estados financieros de SQM contabilizan los pagos por arrendamiento como derechos Corfo, consigna La Tercera.
Entre enero y junio de este año, los balances de la minera no metálica imputan US$ 264 millones en derechos Corfo, un 80% menos que los US$ 1.265 millones que consignó en los estados financieros del primer semestre de 2023.
La cifra es aún menor que los US$ 1.529 millones que reportó como pago a Corfo en la primera mitad de 2022, cuando los precios saltaron a más de US$ 50 mil la tonelada. Pero son aún muy superiores a los US$ 40 millones del primer semestre de 2021, cuando el precio promedio de venta no superaba los US$ 7 mil por cada tonelada, antes del boom del bienio siguiente.
El precio incide porque en la negociación de 2017 entre Corfo y SQM se estableció una nueva escala de pagos de arrendamiento, por las 81 mil hectáreas del salar de Atacama, que está determinada en función del precio.
La cifra parte en 6,8%, pero la tasa marginal se empina a 40% cuando el precio de la tonelada supera los US$ 10 mil. La escala, ahora que los precios están cercanos a ese tope, adquiere relevancia.
Así, por ejemplo, por cada tonelada que SQM vende a terceros, paga a Corfo 6,8% hasta los US$ 4 mil del precio obtenido; otro 10% del precio de entre US$ 5 mil y US$ 6 mil; un 25% de la fracción de valor que se ubica entre los US$ 7 mil y US$ 10 mil; y el 40% solo sobre la parte que se sitúa sobre los US$ 10 mil.
La baja de precios, aportes y utilidades fue en parte compensada por otro factor: un aumento de producción. La empresa produjo 52 mil toneladas de carbonato de litio, más que los 43 mil del primer trimestre y sobre el récord de 51 mil del último trimestre de 2023. Ya en el primer semestre produjo 95 mil toneladas.
PURANOTICIA