La cifra es la más alta de los últimos tres años, superando los 35 muertos de 2023 y los 29 de 2022.
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Gendarmería de Chile reportó en los últimos días tres muertes violentas: un hombre con 250 puñaladas en Puerto Montt, el decapitado en un ritual satánico en Concepción, y otro asesinado a cuchilladas en Alto Hospicio.
Según consigna Emol con cifras de la institución, hasta el 11 de diciembre de 2024, 42 reclusos han fallecido debido a agresiones y riñas, lo que representa el 0,038% de la población penal total de 58.864 personas. Este número es el más alto de los últimos tres años, superando los 35 muertos de 2023 y los 29 de 2022.
Aunque la cifra de 42 fallecidos es la misma que en 2018, la población penal ha aumentado significativamente desde entonces. En 2021 hubo 49 muertos y en 2020, el año más alto reciente, se registraron 61 muertes, en parte debido a la pandemia de coronavirus.
Estas cifras surgen en medio de un debate provocado por las declaraciones del ministro de Justicia, Jaime Gajardo, quien afirmó el fin de semana a El Mercurio que Gendarmería tiene el control efectivo de todas las cárceles del país. Tras conocerse los nuevos casos, figuras políticas de oposición cuestionaron las declaraciones del ministro.
Respecto a las cifras entregada por Gendarmería, el propio secretario de Estado manifestó el día miércoles en Radio Coorperativa que “este año nosotros estamos manteniendo, por así decirlo, las cifras más o menos regulares que hay todos los años desde hace dos décadas en nuestro sistema penitenciario en cuanto a riñas y muertes por personas en riñas”.
Pero los datos aportados por el ministro no coinciden con los de Gendarmería, ya que aseguró que “este año tenemos una cifra un poco más baja en relación a lo que se consolidó el año pasado, que son aproximadamente entre 30 y 40 personas. Lo que quiero decir con esto es que nuestro sistema penitenciario está sujeto a este tipo de contingencias permanentemente y ha estado sujeto a este tipo de contingencias los últimos 20 años”.
“Otra cosa distinta es que esto surja a raíz, por ejemplo, de presencia de bandas de crimen organizado. Y en ese sentido nosotros creemos que es importante distinguir, porque cuando hay presencia de banda de crimen organizado lo que ocurre es que empiezan a colonizar el establecimiento penitenciario, a tener el control del establecimiento penitenciario, y en eso nosotros hemos estado trabajando fuertemente para que eso en nuestro país no ocurra”, cerró el secretario de Estado.
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