Luego de haberlo acusado de “drogarla”, “violarla” y “obligado a grabarse mientras mantenían relación sexuales”, Antonella Muñoz desmintió sus dichos.
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Este fin de semana, Antonella Muñoz, expareja de Iván Cabrera, desmintió sus graves acusaciones sobre el bailarín, las que realizó en una transmisión en vivo a través de redes sociales, con la periodista de espectáculo Cecilia Gutiérrez.
Ahora, bajo la misma plataforma, la joven aseguro que “me encontraba muy mal psicológicamente, dije cosas que no son reales, él jamás me violó, jamás me obligó a consumir drogas, yo soy una persona adulta que tengo poder de decisión y decir si quiero esto o no quiero esto”.
Ante este escenario, el ex participante de “El Discípulo del Chef”, decidió romper el silencio que había guardado hasta ahora y conversó con la periodista Mariela Sotomayor, para Sillón Vip de Radio Agricultura, donde entregó su duro testimonio sobre lo que debió enfrentar al recibir las duras acusaciones.
“Me entero de esto, y entro en dos días terroríficos donde vi todo oscuro. A mi hijos los tuvimos que tomar del condominio donde viven y llevárselos a mi mamá (…) porque imagínate que escucharan algo así”, comenzó relatando el ex “Yingo”.
“No sabía qué hacer. Pensaba, pensaba, pensaba… siendo una persona que siempre ha sido capaz para enfrentar las cosas, decía: ‘¿Esto cómo lo afronto?’“, indicó, para luego agregar que pensó en quitarse la vida. “Yo estaba sentado en el sillón mirando el balcón de un quinto piso, diciendo: ‘Si me tiro tengo que saltar muy alto y tirarme de cabeza, porque no quiero quedar postrado y más encima acusado'”, añadió.
En ese momento, recuerda que pensó que “no era la mejor”, fue ahí cuando pensó en ahorcarse. “Me fui a la pieza, me encerré, me saqué el cinturón, te lo prometo por Dios, lo pasé por la cuestioncita (hebilla), me lo puse (en el cuello) y yo en la cama hice así (tirarlo)”, señaló.
“¿De dónde me cuelgo? Si me cuelgo del soquete se va a caer esta cuestión, ¿cómo lo hago?”, aseguró que fue lo que le pasó por su cabeza, para luego desistir la opción, pensado en sus hijos. “En ese momento los imaginé sufriendo por lo que yo iba a hacer. Dije: ‘No, si yo hago esto voy a demostrar que realmente soy una persona que es culpable”, detalló.
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