El aparente impacto de un proyectil en un hospital de Gaza, en el que había decenas de pacientes, médicos y rescatistas, y unas 1.000 personas refugiadas, dejó cientos de fallecidos, según las autoridades palestinas.
Cientos de personas murieron este martes en el suceso más mortífero en lo que va del conflicto entre Israel y Hamás iniciado el pasado 7 de octubre tras la ofensiva de militantes palestinos en territorio israelí.
El aparente impacto de un proyectil en un hospital de Gaza, en el que había decenas de pacientes, médicos y rescatistas, y unas 1.000 personas refugiadas, dejó cientos de fallecidos, según las autoridades palestinas.
Videos difundidos por medios locales e internacionales mostraban el caos afuera del hospital Al-Ahli, en la Ciudad de Gaza, con víctimas ensangrentadas y mutiladas que eran trasladadas en camillas en la oscuridad.
A medida que pasaron los minutos, se comenzó a revelar la magnitud de lo ocurrido:
El suceso se produce en medio de los ataques aéreos de Israel sobre la Franja de Gaza que han dejado de momento más de 3.300 muertos, según el Ministerio de Salud de Gaza, así como del lanzamiento de cohetes desde la Franja hacia Israel.
Estos bombardeos son la respuesta israelí al ataque masivo del grupo islamista Hamás del 7 de octubre contra Israel en el que murieron más de 1.400 personas, la inmensa mayoría civiles, según datos del gobierno israelí.
Alrededor de las 19:00 hora local (17:00 GMT), una fuerte explosión sacudió el hospital Al-Ahli, el cual está financiado por la Iglesia anglicana en Estados Unidos, por lo que también es conocido como el Hospital Bautista del norte de la Franja de Gaza.
Los reportes que emergieron apuntaron a la presunta caída de un misil.
Hamás e Israel han intercambiado miles de proyectiles desde que se inició el conflicto el pasado 7 de octubre. Pero hasta ahora no hay evidencias claras de quién lanzó el proyectil contra el hospital de Al-Ahli.
Imágenes en una transmisión vivo de la cadena Al Jazeera transmitidas a las 18:59 hora local mostraron una luz brillante elevándose en los cielos sobre Gaza.
Posiblemente se trate de un cohete que parece explotar o desintegrarse. En las imágenes se ve un destello a lo lejos, seguido de una explosión mucho mayor más cerca del hospital que el equipo de verificación de la BBC (BBC Verify) pudo geolocalizar.
Otras imágenes que aparecieron en redes sociales mostraron lo que parece ser la misma explosión desde diferentes ángulos y distancias.
BBC Verify consultó a expertos para determinar si las pruebas disponibles, incluido el tamaño de la explosión y los sonidos escuchados previamente, podrían usarse para determinar su causa.
Hasta ahora los hallazgos no son concluyentes.
En el terreno quedaron cientos de víctimas, entre heridos y fallecidos. Las imágenes mostraban una gran cantidad de personas que yacían en el suelo.
"Partes del hospital están en llamas", relató a la BBC el cirujano británico-palestino Ghassan Abu Sittah. "No sé si es el servicio de urgencias, pero seguro que el quirófano sí. Parte del techo se ha caído. Hay cristales por todas partes".
Otro médico aseguró que el 80% del hospital estaba fuera de servicio y que cientos de personas murieron o resultaron heridas en la explosión.
Además de los pacientes y personal sanitario que había en el hospital, en el interior y al exterior del edificio había civiles -unos 1.000, según los últimos reportes- que buscaban un lugar seguro ante los bombardeos israelíes.
Hasta la semana pasada ahí había unos 6.000 desplazados, pero el hospital fue alcanzado el sábado por un primer ataque aéreo israelí que dejó cuatro heridos. Tras ese bombardeo, unas 5.000 personas abandonaron el lugar.
El corresponsal de la BBC Rushdi Abualouf informó varias horas después de la explosión que a las afueras del hospital se seguían recogiendo restos humanos del suelo.
Hasta ahora no está claro quién es responsable del ataque al hospital.
Hamás, que gobierna Gaza desde 2007, fue el primero en responsabilizar a Israel del ataque, que calificó como un "crimen de guerra".
"El hospital albergaba a cientos de enfermos y heridos, y a personas desplazadas de sus hogares por la fuerza", señaló la oficina de prensa del gobierno de Gaza.
Poco después vino la respuesta israelí. A través de un comunicado, las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF, por sus siglas en inglés) señalaron: "Inteligencia de múltiples fuentes que tenemos en nuestras manos indica que (el grupo) Yihad Islámica Palestina es responsable del lanzamiento fallido del cohete que impactó en el hospital de Gaza".
"Un hospital es un edificio muy sensible y no es un objetivo de las IDF", añadió.
A su vez la Yihad Islámica Palestina, el segundo mayor grupo islamista de la región después de Hamás, negó su autoría en una declaración enviada a la agencia Reuters.
El gobierno de Estados Unidos dijo que, basado en la información recabada y análisis de imágenes aéreas, su evaluación actual "es que Israel no es responsable de la explosión", dijo la portavoz de la Casa Blanca Adrienne Watson.
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, culpó a "terroristas bárbaros" de la explosión.
Mahmoud Abbas, presidente de la Autoridad Nacional Palestina, que es independiente a Hamás, dijo que era una "espantosa masacre de guerra" y que Israel había "cruzado todas las líneas rojas".
En Jordania fue cancelada una reunión en la que iban a participar el rey Abdalá II, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y el líder palestino Mahmoud Abbas, además del presidente de Egipto.
La Casa Blanca también informó que se canceló la reunión en Jordania, pero la visita de Biden a Israel, donde se reunió este miércoles con el primer ministro Netanyahu, se mantuvo en pie.
En un mensaje a la prensa, el mandatario estadounidense dijo que estaba "indignado y entristecido" por la enorme pérdida de vidas y que la evidencia apuntaba a "un cohete errante disparado por un grupo terrorista en Gaza".
Anunció un paquete de ayuda por US$100 millones para Gaza y Cisjordania y refrendó su apoyo a Israel.
Dijo que el Estado israelí "nació para ser un lugar seguro para el pueblo judío del mundo" y prometió que Estados Unidos hará todo lo que esté a su alcance para que sea así.
El gobierno de Netanyahu anunció que permitirá la entrada de ayuda humanitaria a la Franja de Gaza a través de la frontera con Egipto. Pero también señaló que no habrá ayuda a través de territorio israelí hasta que Hamás no devuelva a los casi 200 rehenes que tiene desde el 7 de octubre.
El miércoles, la Organización Mundial de la Salud dijo en un comunicado que "condena enérgicamente" el ataque: "Se debe respetar el derecho internacional humanitario, lo que significa que la atención de salud debe protegerse activamente y nunca ser un objetivo".
Médicos Sin Fronteras, la ONG que ha desplegado personal sanitario en Gaza, incluido el hospital Al-Ahli, también se sumó a las condenas: "Se trata de una masacre. Es absolutamente inaceptable".
"Nada justifica este espantoso ataque contra un hospital y sus numerosos pacientes y personal sanitario, así como contra las personas que allí buscaban refugio. Los hospitales no son un objetivo. Este derramamiento de sangre debe terminar. Ya basta", agregaron en sus redes sociales.
El secretario general de la ONU, António Guterres, expresó en X (antes Twitter): "Estoy horrorizado por la muerte de cientos de civiles palestinos".
Mandatarios de varios países occidentales y asiáticos expresaron su rechazo a la violencia.
El presidente de Francia, Emmanuel Macron, dijo que "nada puede justificar el ataque de un hospital". Añadió: "Nada puede justificar atacar a civiles".
Rusia llamó a una reunión extraordinaria del Consejo de Seguridad de la ONU para tratar el tema. Este jueves, una resolución que condenaba el ataque al hospital fue vetada por EE.UU.
En la otra región palestina, Cisjordania, el miércoles se produjo una manifestación multitudinaria tras el suceso.
Las fuerzas de seguridad de la Autoridad Palestina lanzaron gases lacrimógenos contra manifestantes que arrojaban piedras y coreaban cánticos contra Mahmoud Abbas en la ciudad de Ramala.
También se produjeron manifestaciones masivas de apoyo a los palestinos en países como Líbano, Túnez y Jordania.
(Imágenes: Getty Images, EPA)
PURANOTICIA // BBC MUNDO