Más de 500g de restos ennegrecidos se recogieron de los jardines y de los campos en la ciudad de Winchcombe donde cayó, después de que una bola de fuego gigante iluminara el cielo nocturno.
Un meteorito que se estrelló el año pasado en la ciudad de Winchcombe, en Reino Unido, contenía agua que coincidía casi a la perfección con la de la Tierra.
Esto refuerza la idea de que las rocas del espacio trajeron componentes químicos clave, incluida el agua, al planeta al principio de su historia, hace miles de millones de años.
El meteorito es considerado como el más importante recuperado en el Reino Unido.
Los científicos que publicaron el primer análisis detallado dicen que ha arrojado ideas fascinantes.
Más de 500g de restos ennegrecidos se recogieron de los jardines y de los campos locales donde cayó, después de que una bola de fuego gigante iluminara el cielo nocturno.
Los restos desmenuzados se catalogaron cuidadosamente en el Museo de Historia Natural (NHM) de Londres y luego se prestaron a equipos de toda Europa para investigar.