
Complejo es poder confiar en las cifras que nos va entregando el Ministerio de Vivienda en torno a la reconstrucción en Viña del Mar y Quilpué, si nos enteramos de conceptos tan básicos como que la empresa eléctrica de la región de Valparaíso no tiene conexiones finales realizadas para alguna casa de los damnificados hace 18 meses.
El diputado Tomás Lagomarsino, quien le ha tocado presidir la comisión investigadora de la reconstrucción, nos entrega datos que son mas que reveladores a la hora de evaluar el real avance que han tenido los más de 4 mil damnificados del megaincendio.
Las declaraciones del gerente general de Chilquinta en la comisión investigadora, en donde devela que no existe ninguna casa de un damnificado conectado al suministro eléctrico de forma final, no es más que nuevamente poner en la palestra la ineptitud de las autoridades a la hora de justamente ocuparse de la reconstrucción.
“Se pilla más rápido a un mentiroso que a un ladrón. Este viejo refrán chileno retrata claramente lo que ha sido hoy día la Comisión Investigadora del Megaincendio”, señaló el diputado Tomás Lagomarsino tras la exposición del gerente general de Chilquinta en la comisión investigadora de la cámara, quien aseguró que las personas damnificadas siguen dependiendo de conexiones eléctricas provisorias, ya sea a través de kits de emergencia o instalaciones temporales para viviendas transitorias.
La desconexión de las auotridades, y sobre todo de personajes como la Seremi de Vivienda o el llamado Gerente de la reconstrucción con los damnificados, es evidente al nisiquiera poder entregarles una solución satisfactoria en temas eléctricos, en otras palabras, aunque técnicamente no lo es, pareciera que los damnificados, las más de 4 mil casas, prácticamente estuvieran colgadas al sistema eléctrico.
Este hecho demuestra que en la reconstrucción de las viviendas de Viña del Mar y Quilpué no solo falta una gestión, sino que también un trabajo que vaya acorde con las necesidades de los vecinos. Que a 18 meses del megaincendio no existan conexiones básicas de electricidad, no es más que mostrar un escenario que está lejos de poder concretarse por parte de la autoridad que es dar soluciones finales y concretas a quienes lo perdieron todo.
La denuncia del diputado Lagomarsino y la confirmación del gerente general de Chilquinta, solo dejan al descubierto la poca capacidad que tiene el Estado, este Gobierno y la región en si es dar soluciones a quienes lo perdieron todo en el megaincendio.
No sirven comisiones más o menos, lo que hace falta ahora es un liderazgo regional que tome la responsabilidad de dar respuesta rápida a quienes lo requieren. Esperemos que ese liderazgo despierte en esta región.