El próximo 14 de diciembre viviremos en Chile la segunda vuelta presidencial entre las opciones de la centro derecha con la centro izquierda. Por un lado José Antonio Kast, y por el otro Jeannette Jara, en palabras simples como diría Parisi, o es facho es comunacho.
No será sorpresa si gana Kast. Sí lo será si Jara logra arrebatarle el favoritismo en la urna, pero independiente al resultado, habrá un tercer protagonista que se verá reflejado en los votos blancos y nulos, esa será la métrica y el KPI que tendrá Franco Parisi, quien con su Partido de la Gente se transformó en la tercera fuerza política del país.
Son tres tercios distintos y diferentes a los de antaño, a esa de la década del 70, hoy los tres tercios parecen identificarse con una gran camada de persona llamadas de clase media, la misma que puede ser la primera generación de profesionales salidos de la universidad para una familia. Los mismos que están pendientes de los subsidios estatales, pero la misma que recrimina a la llamada casta política.
El desafío de Parisi estará en tres ámbitos. Primero, marcar una histórica diferencia en nulos y blancos en una elección presidencial, segundo bajar la crítica fácil y comenzar a transformarse realmente en el voto bisagra que podría terminar por dar mayoría a leyes en el Congreso por ejemplo, para eso su tercer y más importante desafío será mantener unida su bancada de 14 parlamentarios.
Parisi no deberá cometer el error de Kast de “pisar el palito”, de salirse de control, solamente deberá trabajar en un concepto de unidad que muy bien reflejó por ejemplo Javier Olivares, diputado electo del distrito 6, y quizás uno de los que tiene mayor perfil de derecha que otros.
Cuando a Olivares lo encaran y le preguntan en qué se parece por ejemplo a Pamela Jiles, su respuesta es sinónimo de que pareciera que este Partido de la Gente 2.0 puede tener un futuro esplendor.
“Tengo muchas cosas en común con Pamela Jiles. Primero somos ambos periodistas, ambos queremos lo mejor también para el país, ambos fuimos escogidos con alta mayoría”, aseguró Olivares, agregando que ambos tienen “las ganas de sacar adelante un proyecto político que está por sobre los egos personales, pero por sobre todo, yo creo, lo que más tenemos en común es que al final lo más importante son las personas, son el Chile que queremos (…) lo mejor es que nos den una oportunidad para que vean este nuevo Partido de la Gente 2.0".
Si este es el relato que tienen los electos parlamentarios de la bancada de la gente, y logran trabajar unidos bajo el liderazgo de Franco Parisi, comenzarán a pavimentar lo que ya todos comentan, podemos no saber quizás inclusive quién gane el próximo 14 de diciembre, pero no habrá duda de quien lo haga el 2030.