Muy pocos saben y conocen del llamado proyecto del Parque Eólico Marino Lile, impulsado por la empresa española Acciona Energía, que busca desarrollar energía eólica marina flotante en un amplio sector marítimo frente a la región de Valparaíso.
La empresa española, la misma cuya filial de construcción por ejemplo realizó la obra del Complejo Penitenciario de Talca que se ubica en Panguilemo y fue inaugurado en enero pasado, también es la empresa tras la construcción del Hospital Marga Marga, con el “pasaje” Abanderado incluido.
Esta misma empresa ahora, en su filial de Energía, es la que pretende que la Subsecretaría para las Fuerzas Armadas le entregue una concesión marítima mayor sobre playa, porción de agua y fondo de mar que asciende a 2.615.166,34 metros cuadrados (m2), esto según el plano aprobado el 20 de marzo de 2024 por el Departamento de Asuntos Marítimos, y cuya solicitud ya hizo la empresa española.
Según la información disponible, el proyecto busca instalar aerogeneradores de 300 metros de altura ubicados a 5 kilómetros de la costa, en el tramo comprendido entre Valparaíso y Quintero. Cada estructura consideraría una base flotante triangular anclada al fondo marino mediante pivotes o anclas conectadas con cadenas. Además, se incluiría la instalación de líneas de transmisión subacuáticas de 66 kV, que llegarían a tierra para conectarse con una estación elevadora de 500 kV.
El proyecto avanza silenciosamente sin que ninguna autoridad se lo haya contado a la comunidad. Por ejemplo, la Subsecretaría de Pesca y Acuicultura autorizó a la empresa Ecos Group SpA a realizar una pesca de investigación vinculada al proyecto, destinada a estudiar la calidad de la masa de agua en el área de instalación y establecer una caracterización fisicoquímica de la línea base ambiental. Paralelamente, el Seremi del Medio Ambiente de la región ya conoce del mismo, sin embargo, la máxima autoridad Álex Galleguillos no fue capaz de responder con mayor profundidad los requerimientos de este medio y solo nos dijo que "en el marco de la Ley de lobby, desde esta Seremi se recibió al titular para informar los alcances del proyecto, sin embargo, no contamos con mayores antecedentes de la iniciativa".
Lo que sí se conoce es que un parque eólico de este tipo, según publicaciones internacionales, podría causar riesgos significativos para el ecosistema, la economía e incluso a la salud humana. Otro estudio en el que participaron científicos del Laboratorio Marino de Plymouth, advierte sobre la posibilidad de que haya cantidades de metal potencialmente dañinas en los sistemas de protección de turbinas porque los riesgos de toxicidad no se han evaluado adecuadamente.
El estudio descubrió que los materiales utilizados para proteger las turbinas eólicas de la corrosión podrían filtrarse al agua circundante, lo que representa un riesgo para los ecosistemas, la seguridad de los mariscos, y por ende la salud humana.
¿Por qué un proyecto de esta magnitud, con presentaciones a al menos tres subsecretarías está tan escondido de la opinión pública?, ¿tendrá algo que decir quienes vivimos en las comunas de Valparaíso, Viña del Mar, Concón y Quintero donde nuestro horizonte marítimo podría cambiar radicalmente con estas mega estructuras?, ¿son seguras realmente?, ¿quién gana con este mega proyecto? Son dudas razonables, sobre todo cuando existe tanto secretismo y hermetismo. Si no hay nada que esconder, ¿por qué no se contó antes?