Cuando se jugaba el último minuto de tiempo añadido, con los granates ganando por 2-0, ambos equipos se vieron envueltos en una confrontación que llevaron hasta el túnel.
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Un bochornoso y abrupto final tuvo el clásico de la Cuarta Región entre Deportes La Serena y Coquimbo Unido, el cual no pudo concluir como debía a causa de un violento enfrentamiento entre los jugadores del cuadro papayero y el elenco pirata.
Cuando se jugaba el último minuto de tiempo añadido, con los granates ganando por 2-0, ambos equipos se vieron envueltos en una confrontación que llevaron hasta el túnel camino a vestuarios donde, de acuerdo a registros que se viralizaron por redes sociales, los protagonistas se lanzaron botellas y bolsas de hielo.
Frente a esto, en declaraciones recogidas por radio ADN, el técnico aurinegro Esteban González remarcó que "nos hacemos cargo de la situación, pero las pulsaciones están a mil. Hay muchos factores externos que perjudicaron lo que pasó. Había una cantidad de guardias importantes para la seguridad y parecía que fue para todo lo contrario. En un partido con tanta seguridad, lo que menos había era seguridad".
En la misma línea, el estratego coquimbano manifestó que "no nos podemos prestar para este tipo de situaciones, tenemos que hablar en la cancha, pero hay cosas que se nos escapan de las manos. Nos tiraron bolsas de hielo en el túnel, condeno esta situación".
Por su parte, el adiestrador serenense, Erwin Durán, prefirió centrarse en la provocación en la que incurrió su pupilo Fernando Dinamarca, hecho que gatilló todo el conflicto posterior con el plantel del Barbón.
"La expulsión de Fernando es acertada. Es un muchacho joven, tiene que aprender. Es un muchacho criado en el club, siente el amor por los colores, pero no está bien lo que hizo. Hay que corregir, no puede cometer esos errores, le falta por crecer todavía, aunque su rendimiento futbolístico fue aceptable, muy bueno. Estamos tranquilos y contentos por el resultado", expresó el entrenador.
PURANOTICIA
