Cuando el reloj marcaba 32 minutos de partido, y el resultado iba 0-0, un grupo de delincuentes con vestimentas de la "U" comenzó a lanzar fuegos artificiales y bombas de ruido hacia la cancha y a la misma tribuna preferencial.
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El Presidente de la República, Gabriel Boric, se refirió a los incidentes registrados al interior del estadio Ester Roa Rebolledo de Concepción, en el marco del clásico entre la Universidad de Chile y la Universidad Católica.
Cuando el reloj marcaba 32 minutos de partido, y el resultado iba 0-0, un grupo de delincuentes con vestimentas de la "U" comenzó a lanzar fuegos artificiales y bombas de ruido hacia la cancha y a la misma tribuna preferencial.
A raíz de esta situación, el árbitro Francisco Gilabert decidió suspender el encuentro y retrirarse con la terna arbitral del césped penquista. Luego de algunos minutos hicieron lo propio los futbolistas de ambos planteles universitarios.
Frente a estos graves hechos, que dejaron a un camarógrafo y al cuarto árbitro con traumas acústicos, el presidente Boric condenó lo ocurrido a través de redes sociales.
"No vamos a dejar que un grupo pequeño de delincuentes se tome los estadios a costa de la gran mayoría que acude a ver un espectáculo en paz y alegría", comenzó diciendo en su cuenta en Twitter.
Luego, completó el mensaje señalando que "vamos a identificar y hacer caer todo el peso de la ley a los que provocaron esto y espero no vuelvan a entrar a una cancha".
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