
El capitán de Universidad de Chile sostuvo que en el club "no nos sentimos clasificados, por ningún motivo".
Marcelo Díaz se refirió en profundidad a los graves hechos de violencia que se produjeron en el partido que disputaban Universidad de Chile ante Independiente en Avellaneda en Argentina por Copa Sudamericana.
En ese sentido, el capitán del club aseguró que el plantel no piensa en la resolución de la Conmebol, pese a que desde el país trasandino han adelantado en reiteradas oportunidades que la U clasificará y se eliminará al Rojo.
"No nos sentimos clasificados, por ningún motivo. Yo en lo personal prefiero pensar que se va a decidir en la Conmebol y lo que sea, va a estar bien. Yo prefiero no hacerme ninguna ilusión al respecto", comenzó diciendo en conferencia de prensa.
"En la parte deportiva estábamos clasificando, pero me resulta complicado hacer un análisis de Conmebol porque no sé qué sucederá. La respuesta deportiva que estábamos dando era que en ese momento la clasificatoria era nuestra, porque así lo decía el resultado", añadió.
Además, reiteró su molestia contra el presidente de Independiente, Néstor Grindetti, por sus dichos de querer ir a buscar los puntos por secretaría: "Lo dije llegando a Santiago, me había parecido repudiable. El obviamente estaba preocupado solamente de lo deportivo, siendo que lo más importante en ese momento eran las vidas humanas. Acá lo más importante siempre van a ser las personas. Lo que pueda pasar con un partido de fútbol, un empate o una victoria, ya pasa a segundo plano cuando ha quedado la cagada en el estadio realmente".
"No hemos conversado con nadie de Independiente, pero he visto algunas publicaciones de ellos, especialmente de los chilenos que juegan en ese club donde hacen atención a lo humano, la salud, que esto no puede volver a ocurrir. Es contradictorio el mensaje de un club, algunos se preocupan de la parte deportiva y los más importantes, los jugadores, nos preocupamos de la salud y bienestar de las personas. Ahí refleja un poco lo que ha sucedido", agregó.
Sobre la barbarie ocurrida, sostuvo: "Se lo comentaba a unos amigos: nunca me tocó vivir una situación así de compleja. Hablaba con gente mayor e incluso amigos de allá, en Argentina, que son de Independiente, y me dijeron que nunca vieron algo así. Claramente, lo que ocurrió fue anormal y atípico. Y nosotros no lo debemos normalizar. Sea de donde sea, debemos erradicar estas conductas del fútbol, porque al fin y al cabo nos hacen ver mal a todos. Es lamentable lo que sucedió. Afortunadamente, no hubo muertos, sino sería más lamentable, pero fue muy feo".
PURANOTICIA