Pablo Ramírez sostuvo que "sabemos que la presión de la Copa Libertadores es diferente y que muchos quieren que traigamos dos o tres jugadores por puesto, pero creo que eso sería traicionar lo que venimos construyendo desde 2019".
                                El gerente deportivo de Coquimbo Unido, Pablo Ramírez, habló luego del sólido triunfo sobre Unión La Calera que le permitió al conjunto coronarse campeón del torneo nacional por primera vez en sus 67 años de vida.
El ejecutivo del elenco "filibustero" conversó con radio ADN y, entre otros temas, se refirió a cómo van a afrontar la temporada 2026, una donde además de defender el título obtenido este año también tendrán el desafío de disputar la fase de grupos de Copa Libertadores.
"Lo que no vamos a hacer es cambiar en lo que creemos, y eso significa mantener la estructura con la que venimos trabajando hace tres años. Pueden pasar cosas como la de Luciano Cabral, que no lo pudimos retener, pero la formación de Coquimbo se puede repetir con seis o siete jugadores desde hace tiempo. Otra parte importante es que sigan subiendo jugadores", partió señalando el directivo.
Asimismo, dejó en claro que "lo que tampoco podemos traicionar es que una parte importante de los recursos debe destinarse a seguir creciendo en el complejo. Sabemos que la presión de la Copa Libertadores es diferente y que muchos quieren que traigamos dos o tres jugadores por puesto, pero creo que eso sería traicionar lo que venimos construyendo desde 2019".
El dirigente agregó que "cuando planeamos esto, yo siempre dije que nuestro objetivo no era ser campeones, y si alguna vez lo lográbamos, iba a ser una consecuencia".
Por lo mismo, Ramírez subrayó que "si el costo de eso es que la gente crea que vamos a traer ocho refuerzos de alto costo para la Copa Libertadores, eso no va a pasar. Vamos a seguir siendo competitivos, pero no nos vamos a volver locos".
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