El resultado le permitió a la "Canarinha" recuperar terreno y escalar al cuarto lugar con 13 puntos, mientras que la Roja se estancó en el penúltimo puesto con cinco unidades, a seis de la zona de repechaje.
La Selección chilena mostró un alza en su rendimiento respecto de lo ocurrido en la última fecha de las Clasificatorias, pero no le alcanzó para mantener la ventaja en el marcador y terminó perdiendo en el epílogo por un ajustado 2-1 frente a Brasil, complicando aún más sus chances de clasificar al Mundial de 2026.
La Roja llegaba a este encuentro apremiada de triunfos luego de cinco duelos consecutivos sin ganar, pero sobre todo por la mala imagen que dejó la caída de septiembre ante Bolivia, dejando a los nacionales en penúltimo lugar, superando únicamente a Perú.
De cara a este pleito, el técnico Ricardo Gareca sorprendió al entregar una nómina con la ausencia de varios jugadores habituales como Ben Brereton Díaz, Mauricio Isla y Gabriel Arias, obligando a un cambio de esquema para enfrentar a un Scratch que sufrió con las inesperadas bajas por lesión de algunos titulares como Alisson Becker, Éder Militao y Vinícius Júnior.
A pesar de lo arriesgada de la apuesta del "Tigre", quien optó por una formación inédita, el elenco criollo asestó el primer golpe antes de que se cumpliera el segundo minuto de partido. Felipe Loyola envió un centro al área para el cabezazo de Eduardo Vargas y con clara complicidad del portero Ederson, "Turboman" convirtió el 1-0.
Al margen de un tiro lejano de Darío Osorio que pasó cerca del arco, el Equipo de Todos fue lentamente retrocediendo en la cancha y le cedió el balón al rival, que conforme el compromiso se fue acercando a la media hora de juego, comenzó a aproximarse peligrosamente al arco de Brayan Cortés.
El local había logrado sortear con éxito los embates de la "Canarinha", pero todo se vino abajo en el cierre de la primera fracción. Los pupilos de Gareca se quedaron reclamando un presunto penal a Diego Valdés y tras cartón, Savinho le ganó la pulseada a Thomas Galdames para enviar un centro a Igor Jesús, quien anticipó a Guillermo Maripán y emparejó las cifras con un frentazo, mientras persistían los reclamos al árbitro Darío Herrera por la supuesta falta al volante.
El inicio del complemento fue completamente favorable para el cuadro forastero, que sufrió un gol anulado a Raphinha por un claro offside del hombre del FC Barcelona (51') y en los 57', la "Verdeamarela" exigió la pena máxima por infracción de Rodrigo Echeverría a Rodrygo, situación que no fue advertida por el colegiado y tampoco por el VAR.
La visita mantuvo su evidente dominio sobre el césped, el cual se vio reflejado en un par de ocasiones de peligro (73' y 74') que obligaron a Gareca a agotar las modificaciones para refrescar la parte ofensiva. Fue como en los 81' se generó un contragolpe que no finalizó de buena manera Darío Osorio.
Pero en el cierre del encuentro, cuando mejor jugaba el dueño de casa, vino un baldazo de agua fría, cortesía de Luiz Henrique. El extremo derecho superó a su marcador, se acomodó para la zurda y sacó un zapatazo ajustado al segundo palo, dejando sin opciones a Cortés, firmando así el 2-1 definitivo.
El resultado le permitió a Brasil recuperar terreno y escalar al cuarto lugar con 13 puntos, mientras que Chile se estancó en el penúltimo puesto con cinco unidades, a seis de la zona de repechaje. La Roja tendrá que dar vuelta la página lo antes posible, ya que el martes visitará a Colombia a partir de las 17:30 horas.
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