El nuevo entrenador interino de Universidad de Chile reiteró su optimismo de poder revertir el delicado momento del club, luego de caer en la agonía frente a Ñublense y quedar a un puesto de la zona de promoción en el Campeonato Nacional.
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Pasan las fechas y Universidad de Chile sigue extendiendo su crisis, pues la noche del jueves cayó por un agónico 1-0 frente a Ñublense en Chillán, resultado que dejó al cuadro azul a un puesto y tres puntos de la zona de promoción.
Ni siquiera la llegada de Cristián Romero como entrenador interino, tras la salida de Esteban Valencia, pudo devolver a los estudiantiles a los triunfos. Sin embargo, el DT reiteró su optimismo de poder revertir el delicado momento del club.
"Sé que no estamos en una situación cómoda ni fácil, nadie dijo que iba a ser fácil salir de esta situación. Hay un factor ánimico que está presente y que hemos intentado gestionar de la mejor manera. Sigo con la misma convicción, sigo muy confiado que esto lo vamos a sacar adelante, independiente de todo lo que diga la gente y lo que diga el momento. Hay que tener fortaleza", expresó en conferencia de prensa.
Sobre el trámite del cotejo, sostuvo: "Me parece que el partido era para terminar 0-0, pero los partidos se ganan con goles y cometimos un error faltando muy poco para terminar el partido. Los jugadores se esforzaron al máximo, en ese sentido quedé muy tranquilo. El fútbol es así, los penales son parte del juego y nosotros cometimos uno".
"A veces cuesta más de lo normal, los jugadores saben que no será fácil. Sé que estamos representando a mucha gente y esa responsabilidad la estamos asumiendo como corresponde. La gente del club está apoyandónos al máximo para sacar esto adelante", complementó.
Por último, sobre el clásico universitario de este domingo ante Católica, dijo: "Va a ser un desafío importante. Buscaremos la manera de acercarnos al rival y hacerle daño".
PURANOTICIA
