El cauce llega hasta la laguna del Jardín Botánico, afectando también a tan importante espacio natural de la Ciudad Jardín.
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Vecinos y dirigentes sociales del sector de Villa Independencia, en la parte alta de Viña del Mar, en compañía del diputado Rodrigo González, denunciaron un episodio de contaminación que desde hace varios meses les ha complicado la convivencia.
Esto, principalmente por los malos olores que provienen de la vertiente de Quebrada Las Conchas, agua que tiempo atrás era transparente y hoy en día se convirtió en un líquido negro y espumoso que fluye, provocado por el escurrimiento de aguas servidas que vienen de tomas y edificaciones sin un eficiente sistema de alcantarillado.
Según relataron los afectados, desde el mes de octubre del 2021, la que solía ser una vertiente natural de agua cristalina y aguas lluvias, comenzó a expeler un olor nauseabundo y a transportar un líquido negro, que en determinados momentos del día se hace irrespirable, causando dolores de cabeza y nauseas a niños que habitan próximos al lugar, episodios que se hicieron insoportables en las últimas semanas.
Al respecto, el diputado Rodrigo González responsabilizó la falta de control y equipamiento necesario por parte de la sanitaria Esval, como también por la falta de alcantarillado que debe implementar Serviu.
“La vertiente viene en un valle desde el cerro hasta 1 Norte, pasando por el Jardín Botánico, afectando a la ciudad completa por una situación que no ha controlado la empresa Esval ni Serviu, por las obras construidas que no tienen la infraestructura para la evacuación de las aguas servidas y residuos tóxicos domiciliarios e incluso industriales”, señaló el parlamentario PPD.
“Oficiamos a la Superintendencia de Servicios Sanitarios y también enviamos una carta a Esval y a Serviu, así como a todas las autoridades regionales, porque acá tendrá que construirse una obra de gran envergadura con colaboración de la municipalidad. Vamos a mantenernos atentos a las acciones de los organismos públicos, porque es obligación de ellos responder a los vecinos y reparar el daño ambiental que están viviendo”, agregó.
La contaminación, además de afectar a los residentes, también tiene efectos negativos en la Escuela Popular de Artes, la Escuela Básica Villa Independencia y las plantaciones de huertos familiares cercanas al Rodeo del Olivar, todos colindantes al cauce.
Para Eduardo Cisternas, fundador de la Escuela Popular de Arte y dirigente del sector, la principal preocupación es que muchos proyectos que tienen comunidad no han podido concretarse, y los menores de edad han sido los principales perjudicados con el olor a podredumbre constante.
“La actual contaminación nos afecta porque todos los veranos tenemos una escuela donde se hacen huertos familiares y se ocupa el agua de la cuenca Las Conchas, que es una vertiente natural que tenemos en la Villa Independencia, y que incluso se quiere hacer un sendero ecológico que llegue hasta el Jardín Botánico, proyecto que no se ha podido materializar porque ahora se tienen que limpiar las aguas contaminadas, lo que nos tiene muy preocupados”.
Según afirmó Eduardo Cisternas, quien sostuvo una reunión con la actual administración municipal por este tema, se les ha brindado apoyo para limpiar y desmalezar la quebrada en conjunto con la comunidad, pero a su juicio es necesario crear una mesa de trabajo que también sume a Serviu y Esval para urbanizar nuevamente Villa Independencia, ya que ante el gran crecimiento demográfico de los últimos años, están colapsando los servicios sanitarios, cámaras y alcantarillados.
PURANOTICIA
