
El organismo precisó que el proceso consideró peritajes técnicos y declaraciones de testigos para determinar eventuales responsabilidades.
A más de cinco meses del trágico naufragio de la lancha a motor Bruma en Coronel, la Gobernación Marítima de Talcahuano informó este lunes el cierre de su Investigación Sumaria Administrativa Marítima (ISAM). El proceso, que deja a siete pescadores desaparecidos, entra en una nueva etapa en la que las partes involucradas podrán presentar sus descargos antes de un fallo final.
A través de un comunicado, la Armada de Chile señaló que el dictamen se mantendrá en carácter reservado para no entorpecer la causa penal paralela que lleva adelante la Fiscalía Regional del Biobío.
El cierre de la investigación de la Armada se da en medio de reveladores antecedentes que han reforzado la tesis de un choque en altamar. En las últimas semanas se han conocido registros de comunicaciones radiales entre embarcaciones, así como imágenes de cámaras de navegación que mostraban destellos en el mar y restos flotando la madrugada del siniestro.
Un testimonio ha sido particularmente crucial: el de Pablo Sanhueza, hijo del vigía de la embarcación Cobra. Su padre, un tripulante del buque, le confesó haber sentido "cómo se rompían tablas, como si fuera una casa", reforzando la hipótesis de que la "Bruma" fue colisionada por la nave industrial.
A más de cinco meses de la tragedia, aún no hay detenidos ni responsables identificados. Las familias de los siete pescadores desaparecidos, todos oriundos de Constitución, continúan su incansable búsqueda de justicia, con la esperanza de que el proceso penal finalmente entregue respuestas.
PURANOTICIA