
Los restos de la embarcación, incluida la proa, ya están bajo custodia en la Gobernación Marítima.
La esperanza de hallar con vida a los siete pescadores desaparecidos tras el naufragio de la lancha "Bruma" se desvanece cada día más, mientras la Policía de Investigaciones (PDI) concentra sus esfuerzos en determinar qué ocurrió realmente la madrugada del 30 de marzo en la costa de Coronel, reigón del Biobío.
Los restos de la embarcación, incluida la proa, ya están bajo custodia en la Gobernación Marítima. Hasta allí llegaron familiares de los tripulantes, quienes pudieron observar de primera mano los daños sufridos por la estructura.
La Brigada de Homicidios de Concepción, junto a peritos del Laboratorio de Criminalística de la Cobertura Zona Sur, realizaron peritajes clave y recolección de muestras con el objetivo de esclarecer las circunstancias del siniestro.
Mientras tanto, los equipos de búsqueda han logrado recuperar partes de la nave y pertenencias de la tripulación: vestimentas, el ancla e incluso la balsa de emergencia, que fue hallada sin activar, profundizando el dolor de las familias. El hallazgo de este último elemento ha sido especialmente impactante, ya que, como reconocieron cercanos a las víctimas, “terminó con la ilusión de las familias de encontrar a los tripulantes con vida”.
A pesar del complejo escenario, las diligencias continúan en la zona con el compromiso de entregar respuestas concretas a las familias, que aún no pierden la esperanza de cerrar este capítulo con claridad y justicia.
PURANOTICIA