De igual forma, dijo que “yo trato de ser lo más didáctica posible" y que "las prioridades eran las siete zonas de sacrificio que estaban en el programa del Presidente”.
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La ministra de Minería, Marcela Hernando, se refirió al acuerdo logrado el jueves con los trabajadores de Codelco por el cierre paulatino de la fundición Ventanas, hecho que dio por finalizado el paro de los trabajadores del cobre que se había iniciado el miércoles.
En declaraciones a radio Biobío, la secretaria de Estado realizó una autocrítica por la forma en que se anunció el cierre de la planta el viernes pasado. “Reconozco muchos errores comunicacionales respecto de cómo se dicen las cosas; y también míos, personales, respecto de cómo uno dice y explica las cosas”, afirmó.
Hernando había manifestado, cuando Codelco anunció el cierre de la fundición, que le “habría gustado saber con anticipación”. Al respecto precisó que “yo trato de ser lo más didáctica posible (…) yo decía que las prioridades eran las siete zonas de sacrificio que estaban en el programa del Presidente”.
En relación al acuerdo del jueves, sostuvo que “estamos muy contentos, ayer ganamos todos. Yo creo que los primeros que ganaron fueron los ciudadanos de Quintero y Puchuncaví con este anuncio que tampoco va a hacer tan abrupto, va a ser un proceso largo que recién se inicia”.
La ministra aclaró que durante la movilización “estuvieron paralizados los dirigentes, pero desde el punto de vista de si funcionaron o no funcionaron las faenas, funcionaron con menos gente. No se pararon las máquinas”.
Recalcó que “no se invirtió en Chile hace décadas en materia de fundiciones y ayer lo decía Máximo Pacheco en la reunión, una cosa que llama la atención, o sea para ellos (Codelco) el negocio estaba en la minería, pero no estaba en el ‘Fure’ (fundición y refinería). Eso ni siquiera aparecía en las declaraciones estratégicas”.
“Ahora recién con la última planificación que acaban de hacer este año con la actual administración, aparece ‘Fure’, como una cosa que también es parte del negocio. Entonces la última fundición que se construyó en Chile y que hoy es privada, Alto Norte, se construyó el año ‘93 y la mayoría de las otras son de la década de los 60”, concluyó.
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