Miguel Rivera insistió en la inverosimilitud de las acusaciones y aseguró que se trataba de una forma de chantaje por lo que presentó una querella por el delito de amenazas y extorsión.
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La Fiscalía de Talcahuano se encuentra investigando al alcalde de Hualpén, Miguel Rivera (PPD), por una denuncia en su contra por abuso sexual.
Una funcionaria de la municipalidad presentó la denuncia contra el jefe comunal y la Policía de Investigaciones (PDI) ya está realizando las diligencias correspondientes.
Según consignó Emol, la jefa de la región policial del Biobío, prefecta inspector Claudia Chamorro, confirmó que existe una orden de investigar “por abuso sexual en contra de la actual autoridad y que, en su momento, era postulante al cargo y cuyo informe policial ya se remitió a la Fiscalía y está en proceso de investigación”.
De acuerdo a los antecedentes del caso, en mayo de este año la funcionaria denunció tres hechos de significación sexual sin su consentimiento de los cuales habría sido víctima entre 2021 y 2022.
En septiembre, el alcalde acudió a declarar de forma voluntaria y entregó una carpeta de documentos que incluyen correos electrónicos y conversaciones de WhatsApp.
Por su parte, Rivera este jueves ingresó una querella por el delito de amenazas y extorsión. Además, presentó una acción judicial en contra del candidato Ismael Olmos, quien habría filtrado la carpeta investigativa.
“Negar obviamente, categóricamente, todas las acusaciones que hoy día se están realizando sin ningún tipo de fundamento, en particular”, manifestó.
En esta línea, relató que de 2021 “que hemos recibido constantes solicitudes de irregularidades, de que han quedado plasmados a través de distintos correos electrónicos enviados a mi persona por la denunciante en particular, en donde se me solicita remover concejales en ejercicio, contratar a personas cercanas de manera indefinida, la construcción de una sede social, conversar con el Presidente de la República para poder encasillarla de mejor manera en su trabajo laboral, que ella tiene”.
El jefe comunal también leyó uno de los correos electrónicos que le habría enviado la denunciante indicando que el “la postdata, que dice, espero pronta respuesta a las solicitudes, si una de ellas no la acepta, tendré que pasar al siguiente paso, que sería seguir el consejo de mi esposo y denunciarlo por acoso sexual, con las pruebas de respaldo de mensajes, fotografías enviadas y reputación, tengo el juicio ganado, prefiero llegar a un acuerdo y evitar tener que pasar por esto. Ahora todo depende de usted, y si estoy loca, así es, gracias a usted”.
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