"En menos de un mes ha sufrido múltiples agresiones físicas y psicológicas, de lo cual el colegio tiene conocimiento", señaló la madre de la alumna de segundo básico del colegio Santo Domingo de Guzmán.
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Los casos de violencia escolar siguen estando en boga en todo el país, donde la región de Valparaíso no es la excepción. Y es que a los registros de alumnos protagonizando riñas, siendo detenidos por portar armas o por hacer bullying a otros compañeros, se han sumado una serie de denuncias en la Superintendencia de Educación.
Tal es el caso de la madre de una niña de 7 años, de segundo básico del colegio Santo Domingo de Guzmán, ubicado en el cerro Playa Ancha de Valparaíso, quien acudió a la entidad fiscalizadora a presentar una denuncia por violencia, acoso y bullying en contra de la pequeña, quien ha tenido una serie de consecuencias en su salud producto de estos hechos.
"En menos de un mes ha sufrido múltiples agresiones físicas y psicológicas, de lo cual el colegio tiene conocimiento", comenzó indicando la madre de la menor de edad, según consigna el documento publicado por la página de Facebook «Alerta V Costa».
En primer lugar, expuso que sus compañeros comenzaron a quitarle su colación, para luego continuar a sustraerle sus materiales. Esto dio paso a la violencia física, por medio de tirones de cabello, además de agresiones verbales y amenazas, para terminar con el ahorcamiento de la niña de 7 años.
La mamá relató en su denuncia ante la Superintendencia de Educación que "debido a esto, mi hija empezó a orinarse en su cama, a llorar por las noches, no querer dormir sola", y agregó que "se pone en estado fetal, llorando, asustada".
También contó que acudió al establecimiento playanchino a una entrevista con su profesora jefe, instancia que concluyó con la respuesta de que "hablarían con la madre de esta niña". El problema radica –continuó la apoderada– en que "no es sólo una niña, son de varios cursos de educación básica".
La molestia se acentuó pues, el colegio, teniendo conocimiento de lo que ocurría con la niña, no efectuó algún plan para protegerla, motivo por el cual los hechos de violencia continuaron: "Empujaron a mi hija, pero (le dijeron desde el establecimiento) que la niña estaba bien, sólo asustada", relató la madre, quien aseguró que quien comunicó lo ocurrido fue la tens del colegio, no alguna autoridad o la profesora jefe.
"Posterior a esto, me vuelve a llamar, que volvieron a empujar a mi hija y que ahora no podía mover su pies. Yo estaba trabajando y pedí permiso en mi trabajo para llevar a la niña al hospital pues, llegamos a éste a las 15:25 y salimos a las 22:30 horas aproximadamente", prosiguió en su denuncia ante la SuperEduc.
Cabe señalar que el resultado de esta última agresión fue que la niña de 7 años salió del centro asistencial porteño con yeso.
(Imagen principal de referencia)
PURANOTICIA
